Omelio Barba, director del establecimiento local de la Empresa Apícola Nacional –APICUBA-, informó que lo realizado desde enero superó lo planificado en el 13 por ciento.

Sin embargo, aclaró, el acopio decayó en 21 toneladas en relación con el registro en similar etapa de 2014 como reflejo de la severa sequía que azota al país.

La situación climática afecta la vida de la plantas y provoca disminución de la floración y por tanto baja el potencial de néctar y con ello la miel.

Explicó que de marzo a agosto una gran parte de las casi 13 mil 500 colmenas en explotación fueron trasladadas a zonas costeras para aprovechar la florescencia de especies como el mangle.

Pero el resultado fue menos al habitual por el stress de la vegetación debido a la falta de suficiente lluvia y el considerable calor ambiental, explicó.

En vista de tal situación el pronóstico de producción de miel de abeja se cifra en la cantidad fijada en el plan de 671 toneladas.

Los apicultores esperan que en el resto de 2015, cuando se logran los mayores resultados, aumente la producción con la floración de los bejucos Indio y Campanilla Blanca y Morada, especies altamente presentes en las llanuras camagüeyanas y que brindan un néctar muy bueno.

Barba destacó que toda la miel acopiada hasta ahora tiene calidad máxima, según los controles realizados, lo cual le asegura su exportación el exigente mercado europeo, que paga la tonelada a unos tres mil 700 euros.

APICUBA en Camagüey, que en 2014 acopió 660 toneladas, cuenta con 165 criadores individuales, además de cuatro cooperativas especializadas en esta gestión.

Matanzas es la provincia con los mayores resultados, seguida por Granma, Villa Clara Sancti Spíritus y Camagüey.

{flike} {plusone} {ttweet}