Minerva Portal Gutiérrez, directora de la filial local de la Empresa de Conservas de Vegetales, informó que la operación comenzó por la planta ubicada en Camalote, en el extremo noreste del territorio.

Esa fábrica recibirá en esta temporada la fruta de las varias cooperativas de agricultores enclavadas en la región y también de la vecina Las Tunas.

Mientras la otra industria de la entidad, Mambí, localizada en esta ciudad, todavía está en fase de preparativos para la campaña tomatera, señaló William Montero de la Cruz, administrador de la unidad, quien agregó que confía en que estará lista para mediados de febrero, cuando deben llegar los primeros suministros.

Entre las dos plantas se conveniaron con cooperativas y la empresa Acopio, alrededor de ocho mil 200 toneladas, de las cuales mil 200 las aportarán agricultores tuneros, precisó José Molina Álvarez, jefe del departamento Técnico-Productivo de la filial camagüeyana.

El propósito principal de la temporada tomatera es elaborar pasta, que aparte de emplearse de esta forma en la cocina sirve de insumo para preparar puré y diferentes tipos de salsas para abastecer a las redes hotelera y gastronómica y para la venta en el mercado nacional.

Sin embargo, las lluvias extemporáneas de los últimos tiempos dañaron los semilleros, que fue necesario volver a fomentar, en algunos lugares hasta tres veces.

Ello hace que la fruta no se vea abundante este año, y pudiera ser reflejo del comportamiento con la industria.
El pasado año se incumplieron en más de 600 toneladas los convenios de los productores con la empresa conservera.   

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