¿Un sueño, verdad? Pues para los amantes del baloncesto cubano ese anhelo se hizo realidad hace apenas unos días, cuando representantes de la mejor liga del planeta, la NBA, junto a directivos de la Federación Internacional de esa disciplina en América (FIBA), llegaron hasta la capital para impartir una histórica clínica de entrenamientos.

Liderados por el gigante de 2.18 metros y uno de los mejores defensores bajo los tableros de la historia, el congoleño Dikembe Mutombo, y el ex base canadiense y dos veces Jugador Más Valioso de la NBA, Steve Nash, así como por los primeros entrenadores de las franquicias New York Knicks, Utah Jazz y Orlando Magic, la delegación norteña desarrolló tres intensas jornadas de trabajo con representantes de todas las provincias y también realizó algunas acciones de carácter social.

No quedan dudas que para un deporte tan deprimido en los últimos años, este tipo de campamento trajo una bocanada de aire fresco de cara al futuro. Así nos lo dejó ver el profesor Emilio Maceira, quien además de su presencia en la Universidad de Camagüey, se desempeña como Coordinador General de Arbitraje en la Federación Cubana de Baloncesto.

“En esta clínica los entrenadores norteamericanos trabajaron con los muchachos dándole gran prioridad a los fundamentos técnicos, algo en lo que la NBA es puntera en el mundo y de lo que estamos muy necesitados. Esas acciones, y las desarrolladas con niños y jóvenes, resultan muy importantes”.

NBA para el tinajón

Camagüey estuvo presente en la cita a través de los jugadores Betsy Herrera y Carlos César Villegas, de los equipos de primera categoría; los entrenadores Juan Mapolón, Yosbany Cruz y Luciano Rivero; y los árbitros Rogelio Gleans, José Amado Fernández, José Armenteros y Reinaldo Márquez. También se incorporó al concentrado la comisionada provincial, Nelly Brooks.

Esta última resaltó los beneficios que tal experiencia puede tributar al baloncesto camagüeyano. “Tenemos el compromiso de aprovechar estos conocimientos para retornar a los lugares que siempre tuvimos. Lo primero será transmitirlos a los profesores en la base y en especial a los municipios. En las escuelas y combinados deportivos están nuestros jugadores de los próximos años”.

Sobre la duela, para Carlos César Villegas, esta oportunidad resulta incomparable. “Interactuamos con figuras representativas del baloncesto mundial, y apreciamos de primera mano su nivel de compañerismo y responsabilidad al ejercitarse y entrenar. Ellos son los referentes que uno tiene desde niño e impresiona mucho ver cómo defienden el trabajo en equipo. Esas son cosas que trataré llevarle a mis compañeros en los Tigres”.

Un aparte con la FIBA

A La Habana también arribaron dos “peces gordos” del baloncesto en nuestro continente: el brasileño Geraldo Fontana, jefe de Arbitraje de la región y el argentino Alberto García, director ejecutivo de FIBA Américas.

Para el primero “este campamento traerá frutos positivos, porque el baloncesto cubano tiene tradición. Yo fui árbitro y me encantaba mirar o arbitrar en los partidos de Cuba, tanto el masculino como el femenino. Esa historia de los '80 y los '90 es la que pretendemos recuperar”.

García, por su parte, asumió una visión más abarcadora. “Queremos ver un poquito más allá la luz del túnel. Ya se van perfilando posibilidades como la de que los atletas jueguen en ligas fuera de Cuba y que un día no muy lejano la NBA pueda celebrar un encuentro en La Habana”, señaló.

Un partido así constituiría un hecho sin precedentes, solo superado – quizás– por el juego de béisbol contra los Orioles de Baltimore, en 1999. Mas antes deberán darse muchos pasos, particularmente en las provincias y el torneo nacional. Un buen impulso puede haberse dado hace algunos días, cuando el básket cubano se codeó con el mejor del mundo.