WASHINGTON.- (PL) El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defendió hoy su orden ejecutiva que prohíbe la entrada al país de refugiados durante cuatro meses, en medio de un gran rechazo a nivel nacional y foráneo.

Firmada el pasado 27 de enero, la disposición del jefe de Estado también imposibilita el otorgamiento de visas por 90 días a los ciudadanos de Siria, Iraq, Irán, Sudán Libia, Somalia y Yemen.

Todos están discutiendo si es o no una prohibición. Llamarla es lo que quieren, se trata de mantener a la gente mala (con malas intenciones) fuera del país, escribió el mandatario republicano en su cuenta personal de la red social Twitter.

Después de firmar la orden en la sede del Pentágono en la juramentación del secretario de Defensa, James Mattis, Trump aseguró que la medida pretende mantener alejados a los terroristas radicales islámicos.

Queremos asegurarnos de que no estamos admitiendo en el país las amenazas que nuestros soldados están combatiendo en el extranjero, expresó.

De acuerdo con el gobernante, solo se desea la entrada a territorio norteamericano de quienes apoyan a Estados Unidos y aman profundamente a su pueblo.

La decisión presidencial desató protestas en diferentes sitios del mundo, y medios de prensa y voces de políticos, personalidades, intelectuales y hombres de negocios se sumaron a las constantes y crecientes críticas por tal política.