Ubicada en el mismo local del otrora mercado La Camagüeyana, en la céntrica calle Independencia, entre Ignacio Agramonte y General Gómez, la unidad ofrece diversas producciones de la Empresa de Productos Lácteos de Camagüey (EMPLAC), desde las 7:30 a.m. hasta las 7:30 p.m.

Según explicó Iris Alonso López, jefa del departamento de la Empresa de Comercio del municipio cabecera, las ofertas de La Camagüeyana se asignaron a otros mercados como La Gran Antilla, mientras se mantuvo el mismo personal para el nuevo establecimiento.

Joel Acosta González, administrador de La Casa del Lácteo, declaró que “la aceptación ha sido increíble. El primer día a las cinco de la tarde ya se nos había agotado casi todo: el yogur natural y el saborizado, la leche fluida, el refresco instantáneo... ¡Recaudamos 11 mil pesos! Los productos tienen una gran demanda y este lugar tiene una clientela tremenda, esperamos que vaya en aumento en la medida que se conozca más el lugar”.

La estabilización de las ofertas constituye, sin dudas, el mayor reto de La Casa del Lácteo, pues según demostró Abraham Visbal Martínez, el almacenero, aunque tienen espacio disponible para neveras y hasta para montar una cámara refrigerada para el mantenimiento, empezaron “nada más con dos neveras pequeñas, y eso es insuficiente para estabilizar las ventas y para incluir el helado”.

Lázara Mora Vallejo, dependienta, valoró de positivas las ventas, “lo que más compra la población es el yogur y el queso crema, pero incluso otros quesos, con precios no asequibles para un trabajador promedio, se venden bastante”.

Según Julio Martínez Pérez, director de logística de la EMPLAC, con la motivación de esta nueva unidad la empresa tramita suministros en La Habana para fabricar productos exclusivos para “La Casa” como quesos de formatos pequeños.

La Casa del Lácteo tuvo como antecedente la Vía Láctea, unidad también distinguida por expender derivados de la leche y ubicada en la misma locación hace décadas atrás.

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