La nieta de Margarita estaba vestida desde el amanecer. “A las 6 de la mañana fue para mi casa y le pidió a la tía que la peinara”, cuenta la abuela sonriendo. Desde que inició la semana, los niños del pueblo de Los Ángeles, en el municipio camagüeyano de Vertientes, esperaban ansiosos la llegada de este jueves, para disfrutar la magia del circo.