• Cartas de amor

    Era el año 1868. Tropezaron por serendipias de la vida en una plaza tumultuosa, cruzaron miradas y al instante enarbolaron el deseo como imperiosa bandera. Pero claro, hablarse habría sido demasiado para aquel primer encuentro, y al caer la noche no les quedó más recuerdo que los semblantes del uno y el otro escudriñándose el alma con los ojos.