Al calor de las transformaciones económicas que ha vivido Cuba, el Instituto Nacional de Deportes Educación Física y Recreación pretende lanzarse a potenciar sus estructuras mediante nuevas formas de gestión. Sin poner en riesgo las concepciones fundacionales del ente, la presidencia ha abierto varios frentes, entre ellos uno en Camagüey, donde se trabaja en una idea que puede convertirse en el primer Proyecto de Desarrollo Local que oferte servicios deportivos internacionales.