Lecturas

Espacio para disfrutar de la lectura, aprender y entretenerse.



Ser antorcha y no querer apagarse

Una latica vacía del último módulo de donación, o la de medir el arroz; la camiseta vieja que ahora desempolva cada semana los muebles; el alcohol de la bodega; el palo verde de la mata del patio; esos son los materiales de mi, tu, nuestra antorcha. Eso es suficiente para encenderla, con eso basta para iluminar a Martí en sus 170. El arroyo de la Sierra le complace más que el mar; por eso nos perdonará la luz humilde de la latica vieja.

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Donde nace la hidalguía de la prensa

“En un mortero, y por iguales partes / colóquese porción de todos los oficios, profesiones, / industrias, comercios, religiones, artes./ Se agregan a montón indiscreciones, sentimientos, audacias, hidalguías / virtudes, vicios, llantos, alegrías, / un celemín de natural talento:/ y agregados otras cuantas fruslerías / se pone a cocinar a fuego lento. / Se le hace hervir el tiempo que resista, / por un tamiz de ingratitud se pasa / y se deja secar. ¡Esa es la masa / con que suele hacerse un periodista! / Bueno es tener presente, si proceder se quiere con esmero / y una masa obtener sobresaliente, ./ que en el dicho mortero / de todo puede haber, menos dinero”.

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Inusuales días de Reyes

Generalmente apelo a las remembranzas de viejas costumbres. Tal es el caso del Día de Reyes, acerca del cual hoy les propongo dos inusuales abstracciones en torno a Melchor, Gaspar y Baltazar, los camellos y regalos.

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Un regalo para la maestra

Anoche no nos acostamos sin dejar listo el regalo para las maestras, porque los niños de mi casa saben que una postal es un bien preciado.

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“ Estoy estos días con mis muertos en la cabeza”. Fue la respuesta, irreflexiva, a la pregunta que susurraba mi esposa mientras me alcanzaba una tacita de café hasta el portal de la casa. Por la mañana, en la redacción del Telecentro surgió el tema del engorroso encargo que algunas personas asumen de vestir y ayudar a preparar a una persona fallecida. Son compromisos contraídos con la familia, aun cuando no existan lazos consanguíneos.


Mercado y Arte: contrastes

El otro día caminé mucho con un objetivo específico en la ciudad de Camagüey. Me debía ese ejercicio por la Avenida de la Caridad y por República. Andar por dos calles principales donde topas ese intento de mercado marroquí puertas adentro. Allí la pacotilla equivale a la sencilla operación de invertir poco y cobrar mucho.


Abuelidad

Justo cuando está de moda el abandono y las cifras de una ciudad, de un país, nos dibujan el rostro angustiado de un anciano, he descubierto una palabra honda. Abuelidad. Me hace pensar en cuánto puedo corresponder en amor y atención. Probablemente no he sido la nieta que merecían, pero eso intento al bordar huellas de mis abuelos y también del bisabuelo que he imaginado.


La entrevistada del Che

 Si no se acude a la prensa escrita de la época, a pesar de la corta distancia en un tiempo que nos parece distante, poco se sabrá de realidades y vivencias que conforman el presente. Los inicios de la Revolución en el poder está para algunos tan remoto pero tan próximo en la historia que una parte de la población que no había nacido por aquel entonces o era demasiado joven e inexperta para conocer de verdad lo que se había logrado, desconocen bastante de las epoyeyas de aquellos años.


Estas líneas las habría podido escribir su protagonista con su propia nariz. Sí, tal como lee: con la nariz. Roger Ariel Díaz Sánchez tiene 20 años y estudia Periodismo, realidad que nadie visualizó en el futuro de un niño que fue directo del vientre de su mamá a la terapia intensiva, a raíz de una hipoxia. Su historia no solo es de superación personal, es la de una familia luchando por sobre los vacíos legales del vigente Código de la Familia.