CAMAGÜEY.- La emergencia energética no cogió desprevenidos a los camagüeyanos, quienes asimilan la importancia de seguir al pie de la letra las orientaciones impartidas por el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, para no exceder los consumos de electricidad en los centros laborales y evitar, en lo posible, los apagones en áreas residenciales.

Camagüey reporta 410 entidades altas consumidoras de energía y en ellas se concentra el 80% de la energía total que se comercializa para los servicios productivos, hospitalarios y del sector agropecuario , explicó Wilfredo Recio Conde, director de la Oficina Territorial del Uso Racional de Energía (Onure).

Las supervisiones de consumo que no se concentran solo en los horarios picos, de 11:00 a 1:00 pm y de 6:00 de la tarde a 10:00 de la noche, son realizadas por especialistas de la Onure y de la Empresa Eléctrica.

A esta encomienda necesaria en estos tiempos se suman las organizaciones de masas, encabezadas por los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) y la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), los pioneros mediante las patrullas click y en los centros laborales, donde se han producido ajustes de horarios y en el consumo de energía, el movimiento sindical lidera el movimiento junto a las administraciones y la Ujc.

Un énfasis especial tiene lugar en las comunidades para que los vecinos apaguen los equipos y bombillos encendidos innecesarios, un modo práctico de ahorro.

Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en sus recientes encuentros con dirigentes que lleva a cabo por las provincias para la evaluación de las medidas que se implementan, reconoce que el pueblo no se deja vencer y se muestra seguro de sí mismo, con incontables gestos solidarios y demostraciones de sensibilidad, desprendimientos y apoyo a la Revolución.

La política hostil de la administración de Donald Trump y el reforzamiento de las medidas para impedir que barcos tanqueros arriben a Cuba con combustible hizo suponer a los cubanos, antes de que se diera la noticia oficial, la necesidad de arreciar las acciones de ahorro y adaptarse a las nuevas circunstancias con el lema que promueve la Onure: “Ahorra, ahora”.