MOSCÚ.- Las Fuerzas Armadas rusas, a través de la viceprimera ministra ucraniana Irina Vereshchuk, llamaron hoy a la rendición a los combatientes que permanecen en la acería Azovstal, de la ciudad de Mariúpol, bajo fuerte ataque.
El jefe del Centro Nacional de Control de Defensa de Rusia, coronel general, Mijaíl Mizíntsev, dijo que el pedido fue entregado a la alta funcionaria.
El texto manifestó el compromiso de Moscú con el cumplimiento de los Convenios de Ginebra sobre el tratamiento de los prisioneros de guerra y recordó que el mando ruso garantizó a todos los que depusieron las armas la preservación de la vida, la seguridad completa y la prestación de atención médica cualificada.
Mizíntsev transmitió la solicitud de las autoridades de su país para que Kiev tome medidas que permitan liberar a los civiles que supuestamente se encuentran en ese complejo metalúrgico.
"Estamos convencidos de que se trata de otra desinformación inventada exclusivamente para salvar a los nacionalistas. Hacemos un llamamiento a los representantes de las autoridades de Kiev: si hay civiles en Azovstal exigimos que se tomen todas las medidas para liberarlos y que salgan a través de los corredores humanitarios creados", apuntó.
Las fuerzas de la autoproclamada República Popular de Donetsk anunciaron este martes el inicio de una ofensiva contra ese lugar y el portavoz de las milicias, Eduard Basurin, indicó que "los grupos seleccionados para asaltar este lugar han empezado su trabajo" y destacó que "Rusia está ayudando mucho en esto con aviación y artillería".
