ESMERALDA, CAMAGÜEY.- Intercambiar experiencias en temas agrícolas y buenas prácticas para una producción sostenible de alimentos con tendencia a incrementar fue el objetivo de la Jornada Agrícola organizada por las Brigadas Técnicas Juveniles, la Asociación Cubana de Técnicos Agrícolas y Forestales y el proyecto de colaboración internacional Redes Irma.
Experiencias de jóvenes protagonistas en sus parcelas y de otros que desde la universidad vinculan sus investigaciones a las fincas esmeraldenses, dialogaron en ese municipio con especialistas en torno a la aplicación de microorganismos eficientes autóctonos, la reutilización de residuos orgánicos, la aplicación de abonos orgánicos y la sensibilización de género para un desarrollo sostenible, entre otros temas.
Jorge Wilian Benítez López, uno de los jóvenes premiados del evento, con su estrategia propuso soluciones para aprovechar ese 46 % de los residuos sólidos, que son orgánicos, como una opción sostenible para el medio ambiente, que se ve severamente afectado con los desechos cada día en aumento ante la creciente demanda de productos y servicios.
Así, el aprovechamiento de los residuos de la ganadería y los vegetales en el compostaje y vermicompostaje, y su implementación en las fincas del territorio norteño, reduciría la materia orgánica que iría a los vertederos, el uso de fertilizantes inorgánicos a los cuales sustituiría, y aportaría nutrientes para el desarrollo de las plantaciones y mejores cosechas.
Aumentar las producciones agrícolas y garantizar su calidad es uno de los principales retos de Esmeralda, que tiene entre sus responsabilidades garantizar suministros al turismo que se desarrolla en la cayería al norte de Camagüey.
Otro de los estudios presentados centra su atención en estimular la participación equitativa de hombres y mujeres en el campo, pues a pesar de todos los avances que ha logrado Cuba en este tema, un diagnóstico liderado por la profesora Grisdeilys Herrera Rodríguez, subdirectora del centro universitario de Esmeralda, demuestra que solo el 10 % de la población femenina tuvo empleo en el sector agropecuario entre los años 2015 y 2020 y las mujeres continúan viviendo en situación de desventaja y dependencia.
Por eso, Redes Irma también se propone crear fuentes de empleo para las féminas de ese municipio en los semiprotegidos, las casas de posturas; así como la garantía de capacitación, de manera que se revierta la situación actual y las mujeres también asuman roles protagónicos en la producción y la economía de su territorio y el país.