CAMAGÜEY.- La Asamblea Municipal del Poder Popular de Camagüey, máximo órgano de Gobierno en la localidad, sesionó de manera solemne en homenaje a los 505 años de la otrora Villa de Santa María del Puerto del Príncipe, este 2 de febrero.
La primera declaración de la sesión fue un mensaje de solidaridad y optimismo al pueblo habanero, en plena recuperación tras el paso de un devastador tornado hace solo una semana.
El director de la Oficina del Historiador de la Ciudad, José Rodríguez Barreras, rememoró los esfuerzos de instituciones y pobladores por preservar esta urbe patrimonial.
Refirió que para 1973, cuando muchos de los actuales habitantes no habían nacido y otros eran apenas niños, los camagüeyanos de entonces salvaron lugares sagrados de la Patria vinculados al Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz, héroe epónimo de la región, los cuales fueron declarados Monumento Nacional.
“Ya entonces Fidel valoró el patrimonio de Camagüey, de manera visionaria significó el papel del Camagüey como modelo para el porvenir, habló de los miles de edificios de elevado valor y dijo que hacía que preservarlos”, explicó.
Para Rodríguez Barreras, las reflexiones de Fidel Castro en aquella velada por el centenario de la caída en combate de El Mayor orientaban entre líneas a trabajar de manera ordenada en la conservación del patrimonio edificado y a integrar a todos los actores de la sociedad.
“Hoy debemos seguir haciendo no solo en el cuidado de lo físico sino de todo aquello que nos hace cubanos y camagüeyanos, en los valores, en ser más educados, más decentes, más cultos”.
Agradeció a todos los que han hecho por la ciudad; a los que están y a los que ya cumplieron, a los camagüeyanos por nacimiento o por vocación, a las autoridades, a los trabajadores, a la gente que aporta de manera cotidiana, por pequeño que parezca el aporte. A nombre de la institución que dirige, líder en el conocimiento y la preservación del caudal material e inmaterial de la urbe, prometió “perseverancia y lealtad a lo que se ama: la tierra en la que nacimos y esta ciudad”.
Lisette Bouza Cabrera, presidenta de la Asamblea, esbozó las motivaciones de sus coterráneos para dedicar una semana a profundizar en la historia que los enorgullece y a comprometerse por dedicarle obras mejores que la conserven y eleven la calidad de vida de su gente.
Luego, enumeró los principales resultados económicos y de elevación del bienestar social en el municipio, en medio de un difícil contexto en el que se arrecia el bloqueo comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba y las provocaciones políticas de ese Gobierno imperialista.
En el año del aniversario 150 de la Constitución de Guáimaro, primera Ley de Leyes de la República de Cuba (entonces en Armas), convocó a ratificar el próximo 24 de febrero la nueva Constitución, atemperada a su época y al espíritu libre y soberano de sus ciudadanos.
Bellísimas estampas de la riqueza artística del territorio cerraron la velada, con protagonismo de la Banda Provincial de Conciertos, una de las homenajeadas en la Semana de la Cultura y que cumplirá 100 años en septiembre del 2019.
El Ballet y el Coro de Camagüey, la orquesta de guitarras y la de anklung, que versionó Bonito Camagüey con sus instrumentos indonesios, solistas, actores, zanqueros regalaron a la otrora Villa de Santa María del Puerto del Príncipe, hoy Camagüey, un cumpleaños a la altura de sus 505, en el día de la candelaria.