CAMAGÜEY.- Con un tributo a los participantes y a los caídos en la Operación Carlota desde el Cementerio General de Camagüey, se recordaron los acontecimientos de aquella memorable epopeya internacionalista desarrollada por Cuba, en apoyo a las naciones africanas víctimas del apartheid y del imperialismo.

“En este lugar sagrado donde descansan los restos de nuestros compañeros fallecidos en defensa de los principios revolucionarios y socialistas, nos reunimos aquí los que estuvimos presente desde el inicio de la campaña, en 1975, hasta Cuito Cuanavale, en 1989.

“Además de esa gloriosa campaña, muchos hemos sido fundadores de organizaciones políticas de esta provincia y poseemos una trayectoria como revolucionarios que avala nuestra fidelidad e incondicional a la Revolución cubana y al altruismo que nos ha enseñado”, expresó el escritor y combatiente internacionalista, Benito Estrada Fernández.

Recordaron en el encuentro, convocado por la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC), las palabras del Fidel Castro, sobre la sacrificada labor que se cumpliría en las naciones hermanas, expresadas el primero de octubre en la despedida a los primeros soldados que brindaron su ayuda.

Fueron rememoradas las acciones en frentes de guerra, de Angola, como el Norte, Este, Sur, Cabinda y los encuentros bélicos de Quifangondo, Ebo, Loma Primer Congreso, la ofensiva en Morros del Tongo, primera derrota de los sudafricanos y zairenses. También se recapitularon otros momentos significativos como la batalla de Kangamba, Sumbe, Ruacana, Cuito Cuanavales y las emboscadas de Etralanga-Bailundo.

Idalia Mora Sánchez, viuda de uno de los soldados que derramaron su sangre en el continente africano, y madre de tres hijos que siguieron su ejemplo y regresaron a casa victoriosos, luego de ofrecer sus servicios a esos pueblos oprimidos, expresó a Adelante Digital que el orgullo que siente por ello es profundo porque “aunque queda el dolor por los que murieron en el cumplimiento de su deber, siempre llevaremos en el corazón cómo ofrendaron su vida por una causa justa”.

En julio de 1975, a solicitud de Angola, Cuba envío una delegación encabezada por Raúl Díaz Argüelles y el cinco de noviembre, de ese propio año, la mayor de las Antillas decidió mandar las primeras tropas para dar comienzo a la Operación Carlota. Al concluir esa etapa de nuestra historia, en 1991, habían empuñado el fusil más de 381 mil oficiales y reclutas del país, de ellos unos 15 mil camagüeyanos. En nombre de la solidaridad, al concluir la contienda, un total de 2 mil cuatrocientos cubanos regaron con su sangre las tierras de África.