CAMAGÜEY.- Fue una cantata hermosa, como viene regalando hace años la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en Camagüey, que cada 12 de agosto convoca a trovadores y a poetas para esperar el cumpleaños de Fidel Castro.

Anoche pasó en el Balcón de las Artes, de la Casa del Joven Creador, un escenario diferente porque solía entonarse desde la escalinata del preuniversitario del Casino, pero el nuevo coronavirus ha cambiado las cosas.

Supo a mayor intimidad, tal vez por las limitaciones del espacio y por la concentración de un escenario con amplísima pantalla que contó a través de videos y fotografías el devenir de la XVII Cruzada Literaria.

Esperar cada 13 de agosto, el cumpleaños de Fidel, sigue siendo desde el 2003, un objetivo de este evento inventado por jóvenes de la AHS como gratitud a la obra creativa impulsada por el Comandante en Jefe.

El actor Grabiel Castillo, quien presidió la filial de esta organización hace ya algún tiempo, y acompañó esta Cruzada con su gracia de narrador oral, asumió de director artístico, otro rol que desempeña con prestancia.

La gala quedó prácticamente impecable en su ritmo y en su mixtura de escritores, músicos y artistas escénicos de la llamada vieja guardia en diálogo de experiencia con la nueva generación de talentosos asociados.

Gracias al beneficio de las tecnologías y al buen tino de ir preservando las memorias, se puedo proyectar la lectura del decimista Randoll Machado hecha en Guáimaro; la de Martha Acosta grabada en Sibanicú; la de Dainier Silva dedicada desde Camagüey; y la enviada por Indyra Lisy desde Roma.

En vivo compartieron sus textos Yoandra Santana, Mariela Pérez-Castro y Jhortensia Espineta ─fundadoras de la Cruzada─, Evelin Queipo, Emilio Ramírez, Jesús Zamora, Laida Guerrero, Lázaro Foronda y Lourdes Mazorra.

Los trovadores fueron Reinaldo Rodríguez ─también fundador─, Pedro Sánchez, Juan Pablo Palmero y el dúo Dulce Capricho, de Ada Naranjo y Harold Díaz, quienes compusieron este año la canción de la Cruzada.

En representación del proyecto Catalejo de Cuentos, de narradores orales que llegaron con el grupo de bardos y juglares a varios municipios de Camagüey, participaron Reyna Ayala y Mónica Domínguez, desenfadada al relatar de ocurrencias de Fidel contadas por su amigo venezolano Hugo Chávez.

La XVII Cruzada Literaria de Camagüey culminará hoy, luego de intensos días por territorios alejados del llamado epicentro cultural de esta ciudad, donde ha buscado a los públicos y ha recibido el abrazo de las comunidades.

 

DECLARACIÓN DE LA XVII CRUZADA LITERARIA

Ya se ha hecho habitual nuestro encuentro de cada 12 de agosto. En esta ocasión extrañamos la escalinata, el estandarte nacional, que siempre cuelga desde el techo del otrora Instituto de segunda enseñanza, el bullicio de asociados, invitados y transeúntes dispuestos a disfrutar de la siempre esperada combinación de textos y melodías, de las voces de otros territorios que llegan para saludar al camagüeyano.

En esta ocasión el encuentro se celebra en medio de uno de los lances más abrumadores para la humanidad del siglo XXI. Tiene por tanto una connotación extraordinaria nuestro concierto de esta noche, porque además de su propósito de siempre, ahora se convierte en un grito de esperanza para cada camagüeyano, para cada cubano.

Comenzaremos entonces por agradecer a las autoridades del Consejo Provincial de Defensa, al Centro Provincial del Libro y la Literatura y a la Dirección Provincial de la AHS, por el apoyo brindado al desarrollo de esta edición de la Cruzada Literaria.

Recorrer nuevamente cada pedazo de camino para leer y cantar a los pobladores de la más extensa provincia de Cuba ha sido esta vez, más que nunca, un empeño apuntalado por la máxima dirección de la provincia.

El propósito se muestra explícito con nuestra razón de ser, enarbolar a través de la juventud creadora el espíritu de constancia, con que se están asumiendo las tareas contra la pandemia de la COVID-19 en Camagüey. Llegue pues nuestro agradecimiento a los que con denuedo y empeño han hecho posible el sueño de la continuidad.

Hace 17 años la Cruzada, cual mera utopía, irrumpió en el panorama citadino para contagiar de imágenes esperanzadoras al pueblo y hasta hoy lo ha conseguido y con creces. Al faltarnos los invitados nacionales que siempre nos acompañan, la nueva generación de asociados junto a los fundadores se esmeró por llegar con contagioso espíritu de positividad a cada espacio propuesto. Se produjo entonces el intercambio deseado y se bombardearon las redes sociales tal cual se va haciendo habitual por estos días en los medios de información.

Cuando apenas nos quedan horas para concluir el evento nos sentimos felices y confiados, porque en medio de la vorágine que sumerge a nuestro pueblo en tantas preocupaciones, la literatura y la creación joven han dibujado la esperanza en el rostro de los camagüeyanos. La Cruzada Literaria de la AHS en Camagüey seguirá con su propósito hacia el futuro.

Combínese pues en una sola imagen de esperanza y porvenir el sueño de las letras que esta noche regalamos a Fidel.

Asociación Hermanos Saíz Filial Camagüey

13 de agosto de 2020.