LA HABANA.- Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba, reconoció hoy la consagración de los trabajadores de la salud de la nación caribeña, a los que calificó de orgullo de la nación.

El internacionalismo ha sido un principio que caracteriza a la salud pública cubana y ha estado presente como pilar indiscutible del prestigio que tiene la medicina cubana ante el mundo, el cual se ha logrado alcanzar con el trabajo directo de los internacionalistas en diferentes naciones.

Decenas de miles de profesionales cubanos partieron desde 1960 a ofrecer ayuda a naciones de todas las latitudes ante situaciones de desastres naturales, epidemias, o como parte de convenios intergubernamentales para atender a personas de escasos recursos.

El Contingente Médico Internacionalista Henry Reeve ha asistido a 46 naciones y cinco territorios no autónomos, enfrentando a la COVID-19 en los lugares más recónditos, donde ha necesitado la ayuda solidaria cubana. En todas ellas ha estado la labor incansable de los más de 700 trabajadores de la Unidad Central de Cooperación Médica.

Datos del ministerio de Salud Pública informan que hasta la fecha, dos mil 523 colaboradores cubanos, mil 435 de los cuales atienden casos positivos a la COVID-19, asistieron a 615 mil 165 pacientes, y salvaron 13 mil 590 vidas en naciones que requirieron su presencia.