VERTIENTES, CAMAGÜEY.- Nancy tiene 62 años de edad, se sienta a la sombra de los árboles del parque cada día, desde que vive en el hogar de ancianos Noel Fernández Pérez del municipio Vertientes, donde encontró nuevamente el amor. Es una mujer jocosa, y desde su silla, juega con Guayabita, una perrita adoptada por los abuelos de allí.

Irene Aguilar lleva cuatro años en el mismo hogar, junto a su esposo Antonio. Ellos y los demás 92 residentes, merecen un lugar más confortable y lindo para vivir la última etapa de la vida.

Es por eso que desde abril, se acometen una serie de acciones constructivas que ascienden los dos millones de pesos, que abarcan la renovación de la red hidrosanitaria, techado nuevo, arreglos en la carpintería y en interiores para garantizar mayor confort de la instalación.

La Dra. Acela Ramírez Martínez, directora del centro, comenta que se trabaja intensamente con el apoyo de la Empresa Integral en Redes Hidráulicas y Construcciones ASUR, para finalizar la obra antes de las celebraciones por el venidero 26 de julio.

La casa donde conviven los adultos mayores, unos por decisión y otros porque no les tocó una vejez abrazada por el calor de los suyos, cuenta con cinco salas, cuatro para hombres y una para mujeres, y la atención constante de un médico y el personal de enfermería las 24 horas del día.

Margarita de la Nuez Mora es trabajadora social en la institución desde hace cinco meses, a quien le entusiasma los aires de renovación y mejoramiento del hogar, porque a los abuelitos hay que hacerlos felices, como bien afirma.

En este sitio, 87 trabajadores deben garantizar el bienestar de los ancianos, algunos realizan más de una labor debido a la falta de personal para la asistencia social y la limpieza. La dieta alimenticia y los medicamentos están garantizados, según afirma Ramírez Martínez. Cuentan además con la cooperación de todas las bases productivas del territorio, y las donaciones de trabajadores por cuenta propia, que han proporcionado bebederos, batidoras y mantenimiento a las camas.

 

La tercera edad debe estar rodeada de amor, de felicidad y tranquilidad. Que cada paso constructivo que se ejecute fortalezca también la sonrisa de los abuelos en el hogar Noel Fernández Pérez , para hacer placentera su estancia allí.