CAMAGÜEY.- Sin envanecerse en lo logrado y si yendo a las cuestiones que pueden hacer mejor, los trabajadores de las sucursales del Banco Popular de Ahorro (BPA) en la región agramontina valoraron los resultados del sector en el 2023 en encuentro que tuvo lugar en el Centro de Convenciones Santa Cecilia.
Dania Vega, directora comercial de esa institución financiera, esbozo ante el auditorio los aspectos contenidos en la elevación de la calidad de los servicios que se prestan, frente en el que deben seguir mejorando mediante una efectiva previsión en la comunicación y en aquella personalizada con los clientes que interactúan directamente.
Las cifras hablan por sí solas. Por concepto de seguridad social la red de bancos populares de ahorro ejercieron 62 295 pagos mensuales, captaron 82 572 tarjetas magnéticas, mientras sumaron 489 030 personalizadas.
El informe central abordó la política crediticia y la promoción de la cultura del ahorro en la población que fijo un incremento de más de 133 millones de pesos en relación con el 2022.
No obviaron en los análisis la necesidad de desarrollar la automatización de los procesos informáticos robustos, seguros y eficientes y el incremento de utilidades del BPA.
Foto: Fotos: Juan Mendoza Medina/RCA
En un contacto con el colectivo, Federico Hernández, máxima autoridad política en el territorio, reconoció que tanto el Partido Comunista de Cuba (PCC) como el Gobierno se han sentido acompañados por los trabajadores de la entidad y muy especialmente, en buscar soluciones a los problemas en “este escenario de mucha complejidad en el orden financiero y económico en el proceso de bancarización”.
Aralys Rodríguez Álvarez, directora de la sucursal 5992 de Florida, expresó que el Partido puede sentirse confiado en que no fallaran “vamos a seguir trabajando cada vez más, dando lo mejor de nosotros”.
El miembro del Buró Provincial del PCC, Roberto Conde, insistió que aun cuando no se resuelvan los problemas de los clientes, con una buena comunicación ellos salen persuadidos de la realidad y favorece a contrarrestar el nivel de incertidumbre que se genera con la insatisfacción de las necesidades de la población en el ámbito económico y social.
El dirigente político anunció que Camagüey redujo en el 2023 el déficit presupuestario en más de 500 millones de pesos, señal que debe seguir abriéndose paso para en lo adelante en el camino de alcanzar la categoría de superavitario.