CAMAGÜEY.- Creo que pocos olvidan su primer día en la Organización de Pioneros José Martí. Saberse un poco más grandes y tener la responsabilidad de llevar en el cuello un atributo con tanta historia, no se borra fácil de los recuerdos.
En la escuela primaria José de la Luz y Caballero de la ciudad, por ejemplo, hacer una M grande en la plazoleta, escuchar canciones en honor al héroe argentino y recibir de manos de sus padres el ansiado triángulo azul, se convirtió en una fiesta. Es así cada año en todas las escuelas del país.
El relevo ya está en manos jóvenes. Toca entonces reforzar los compromisos con el estudio y fomentar el respeto a los maestros y la familia. Esa es hoy la manera más útil que tienen nuestros niños de pensar como país.
Desde este ocho de octubre, los más de 8000 escolares de primer grado en la provincia, agregarán a su lista de prioridades, como lo hicimos la mayoría, la de ser como el Ché.
Las actividades de ingreso, extendidas por toda la geografía camagüeyana, forman parte de la jornada Camilo-Ché, que hasta el día 28 del propio mes, servirá de homenaje a dos de las figuras “cubanas” más legendarias.