CAMAGÜEY.- El festival de cine Hieroscopia, que hace una década desarrolla el Movimiento Audiovisual en Nuevitas (MAN), culminó su edición de este año, con la rotunda satisfacción de cumplir esa meta “contra viento y pandemia”.

Los organizadores prefirieron marcarla con el número “9.1”, debido a las medidas sanitarias por el nuevo coronavirus, limitante del acceso hasta el norte de Camagüey de invitados de otras provincias.

A través de las redes sociales, personalidades cubanas enviaron mensajes de acompañamiento al festival, por ejemplo, la actriz Luisa María Jiménez calificó de valiente y necesario el MAN por su impulso del cine.

También insistieron con su disposición, el locutor Pedro Martínez, las actrices Camila Arteche y Edenis Sánchez, y el actor y director Jorge Molina, para quien Hieroscopia es uno de los eventos más honestos y lindos de Cuba.

No obstante, el festival mantuvo su estructura de talleres y proyecciones propios de ese suceso cultural pensado para mostrar las obras de un año de trabajo, del grupo de jóvenes realizadores confabulados con su comunidad.

El organizador Hugo Navarro siempre destaca el carácter de resistencia del MAN, al superar durante 14 años las adversidades por constituirse alternativa de inclusión social frente a los llamados epicentros culturales.

Comenzó como proyecto nombrado El cuchillo de Macbeth, integrado por instructores de arte que a canalizaron sus inquietudes creativas con el lenguaje audiovisual, y presentaron la primera muestra en la galería Guernica.

Al poco tiempo, el grupo encargó a la Peña Manuel Maure Parri la organización del primer evento, con la proyección de 22 obras de 16 artistas, de los cuales 12 eran nueviteros.

Involucrado este año como actor de una obra acerca de la creencia asociada a los gatos negros, el escritor Tomás Cano ratifica el vínculo estrecho con el MAN y la humildad de esos jóvenes al recibir las experiencias de su peña.

Para la jovencita Brenda Ramírez, el grupo ha sido un descubrimiento y una motivación, pues ya se entusiasma por componer música para cortos, cuando complete la formación como flautista de la Banda Municipal de Conciertos.

Fascinada también quedó Yanet Rodríguez, estudiante de sicología, quien participa por primera vez en Hieroscopia con una fotografía digital admitida en la muestra de artes visuales de la galería Guernica.

Desde Holguín llega el crítico Jesús Rodríguez, para promover la pertinencia del nivel medio de audiovisuales, por los resultados de dos estudiantes de escultura en un taller complementario en los Estudios de Animación Anima.

A esa conclusión ha arribado el MAN por un camino más largo, pues sus integrantes se han forjado de manera empírica, con el principio de la voluntad para hacer y crecer con la obra.

Para los realizadores de Nuevitas, la tecnología nunca ha sido un freno, por el contrario, las ganas de contar historias en movimiento florecen lo mismo con un celular que con una cámara con mayores prestaciones.

Así, a golpe de prueba y error han ido registrando las imágenes de una región, y están preservando las memorias colectivas de un pueblo de pescadores, primer lugar donde nació la villa devenida Camagüey.

La actriz Aymara Jiménez pertenece al grupo desde el 2012, y define como gratificantes las vivencias en su entorno, porque se sabe admirada y seguida por alumnos y vecinos, y se siente cada vez más comprometida con ellos.

Como insiste la periodista Laura María Hevia, el MAN constituye una escuela experimental sui géneris que ha resignificado la vida de las personas, porque los habitantes se afianzan como público por sus roles como hacedores de cine.

Por eso, cada versión de Hieroscopia vuelve la mirada a los inicios, a la semilla de sus fundadores, a la cosecha en los continuadores, al alma límpida de la gente común con horizontes de sueños infinitos y profundos como el mar que Nuevitas puede tocar con sus ojos.