LA HABANA.- Recientemente se anunció el cambio de hora de la conferencia de prensa que ofrece a diario el doctor Francisco Durán para actualizar sobre la situación epidemiológica de Cuba, una decisión que permitió alejar la transmisión televisa del horario pico de consumo eléctrico que tiene lugar al mediodía.
Pablo Roque Díaz, Profesor Titular del Centro de Estudios Energéticos y Tecnologías Ambientales (Ceeta), de la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas (UCLV), explicó al periódico Trabajadores que los consumos de energía eléctrica se han disparado luego de hacerse masivo el aislamiento social de la mayoría de las personas para evitar la propagación de la COVID-19.
Hoy todos los estudiantes de cualquier nivel de enseñanza, y una gran parte de los trabajadores, se encuentran en receso forzoso y consumiendo cantidades de energía similares a las que normalmente se consumen en el período vacacional, recordó.
Según cifras recientes de Elaine Moreno Carnet, directora de la Onure, estos consumos alcanzaron en abril un promedio diario de 54 mil 353 megawatt-hora (MWh), frente a 52 mil 777 MWh, promedio diario del mes en los últimos cinco años, lo que representa un sobreconsumo de 1583 MWh diarios, que requieren de más de 400 toneladas de combustible adicional cada día, aludió.
Roque Díaz aclaró que aunque prácticamente la visualización de la conferencia de prensa representa un consumo similar de electricidad, no es el mismo tipo de combustible.
Se enfatiza mucho en sacar la operación de los equipos altos consumidores, y también de otros, de los dos horarios picos, el del mediodía y el de la tarde noche, ahí es donde está la respuesta, dijo.
Afirmó que en estos horarios picos la demanda instantánea de electricidad se dispara, entonces para satisfacerla es necesario poner en funcionamiento casi la totalidad de las centrales eléctricas del país, incluidas las más ineficientes, y asimismo los grupos electrógenos que consumen el valioso combustible diésel que es mucho más caro que el fuel oil o el crudo cubano que se usa en condiciones menos críticas.
Es por eso que se orienta desplazar mediante acomodo de cargas todas las demandas posibles de esos horarios hacia otros, agregó.
Por ejemplo, en la provincia de Villa Clara, la demanda instantánea en los horarios picos alcanza los 180 a 200 MW, frente a valores mucho menores en los horarios antes y después de esa hora, que pueden ser satisfechos con cantidades similares de combustible, pero mucho más baratos que el diésel, que igualmente se precisa para medios de transporte y otras actividades ajenas a la generación eléctrica, argumentó.
Añadió que desplazar la conferencia de prensa del doctor Durán aleja esa demanda masiva de todo el país del horario pico del mediodía, además de permitir adelantar otras actividades, como la cocción de alimentos del almuerzo en efectos electrodomésticos, lo que contribuye a aplanar el pico.
Según las mismas fuentes, durante la última semana la demanda pico del mediodía del sistema eléctrico nacional se redujo en 138 MW, lo que debe haber provocado una disminución considerable de la demanda de diésel por evitación de puesta en funcionamiento de las plantas que lo consumen, expresó.