CAMAGÜEY.- Tras más de 100 días sin tener casos de COVID-19 por transmisión local, pues los últimos habían enfermado fuera del país, se confirmó este miércoles, en el municipio de Florida, como parte de las acciones de vigilancia epidemiológica que se llevan a cabo por el sistema de salud, el caso número 56 de la provincia. Ahora Camagüey presenta dos casos activos.
El nuevo PCR positivo corresponde a una camagüeyana de 27 años, con 32 semanas de embarazo —segunda gestante que se infecta en la provincia. Durante la investigación epidemiológica no se ha podido detectar la fuente de infección. Se mantienen aislados 41 contactos directos y 62 contactos de contactos, de los que ya, al cierre de esta información, 58 habían resultado negativos al examen. Además, se aisló a parte del personal médico que la trató.
La paciente fue identificada con síntomas respiratorios por su médico de la familia e ingresada el día 23 de agosto, pero las condiciones climatológicas impidieron analizar su muestra hasta el miércoles, cuando se confirmó. Ahora Florida aporta 10 casos y es el segundo por detrás del municipio cabecera con mayor incidencia del virus en el territorio.
En ese municipio se tomaron medidas para el control del foco como la realización de PCR a los vecinos más cercanos de este último caso, suman 103 personas en estudio. Además, se les realizó el examen a todos los hospitalizados con síntomas respiratorios en la demarcación. A partir de esta alerta se incrementó la vigilancia también en el resto de la provincia.
Como parte de esas acciones de vigilancia permanecen hospitalizadas en Camagüey otras trece personas sospechosas, siete en el hospital Amalia Simoni, uno en el hospital pediátrico y dos en el Hotel América, por presentar bajos riesgos. Once camas destinadas al enfrentamiento a la COVID-19 están ocupadas y 37 disponibles para su utilización, mientras que en centros de aislamiento permanecen 90 personas.
Juan Jesús Llambías Peláez, director del Centro Provincial de Higiene Epidemiología y Microbiología de Camagüey, insistió en que la enfermedad representa todavía un peligro potencial para los camagüeyanos. “Hoy ya las personas para saludar se dan la mano e incluso se besan, poniendo en riesgo su salud y la de la otra persona. La enfermedad puede estar en cualquier lugar y solo se puede asegurar control sobre ella con una vacuna específica aplicada a la mayoría de la población. Mientras eso no ocurra estamos en riesgo”, enfatizó.
Desde que comenzó la epidemia se han analizado 9 426 muestras de camagüeyanos, el 0.56 % han resultado positivas. A pesar de que los números son favorables, continúan las acciones para contener el virus. En la última semana se realizaron 459 PCR. Ahora la tasa de incidencias es de 7.30 por cada 100000 habitantes, lugar once del país.
El llamado es a no descuidar las medidas higiénico-sanitarias, mantener la desinfección de manos y superficies con soluciones cloradas, el uso del nasobuco y el distanciamiento físico entre individuos, únicas vías efectivas para contener al SARS-CoV-2 y evitar su propagación.