CAMAGÜEY.- La tercera edición de Sonido Camagüeyano recién cerró en esta ciudad tras casi nueve horas de música ininterrumpida. Más de diez mil personas coincidieron en la Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte en la madrugada, y a muchos les sorprendió el amanecer bailando.
Si la arrancada con el Ballet Folklórico de Camagüey anunció que la fiesta retaría la fría noche, lo de Karachi casi a las 11:00 p.m. resultó sorprendente. El público coreó, encendió luces de los celulares, sacó pañuelos... respondió a la convocatoria de la orquesta con una actitud que no mermó al subir al escenario Maravilla de Florida, que tuvo momentos clímax con Havana D´ Primera, Rumbatá y Bamboleo, y que se mantuvo con cada agrupación hasta poco después de las 7:00 a.m., cuando el anfitrión del megaconcierto, Manolito Simonet, pidió un aplauso para quienes esperaron al final.
Quedará para la historia la presencia en esta oportunidad del joven talento Cimafunk, una sensación del pentagrama musical cubano cuyo pegajoso estribillo “me voy...” fue repetido por varios de los vocalistas que animaron la velada.
Antes de subir por tercera vez en una semana a un escenario de la provincia, dialogó con Adelante Digital sobre lo inspiradora de esta ciudad y aseguró que volverá muchas veces.
Ya con el sol y los últimos acordes de su Trabuco, Manolito Simonet afirmó que seguirá apostando por este encuentro de artistas que es invitación permanente en la Semana de la Cultura aquí, y que en el 2020 deberán volver Van Van y Maykel Blanco, y está invitado David Blanco.
