La red cardiopediátrica de Camagüey ha mantenido sus consultas pese a la pandemia provocada por el SARS-CoV-2, sobre todo en los menores de un año y el diagnóstico prenatal de patologías congénitas que facilitan la disminución de las muertes por cardiopatía, un indicador que mantiene estabilidad durante los últimos diez años, cuando las cifras han oscilado entre uno y dos fallecidos. El Día Mundial del Corazón es, por tanto, un motivo de festejo.