• Alegría de Pío: jamás una derrota

    Alegría de Pío pudiera considerarse como sinónimo de una experiencia amarga, de un golpe al corazón de la inexperta tropa rebelde, el cinco de diciembre de 1956. Sin embargo, los tropiezos enseñan y la aparente derrota, definitiva, no se consumó. Los 82 rebeldes que juraron terminar el proceso libertario soportaron la cruz de la lucha desigual hasta el contraataque que sacudió los cimientos de la misma tiranía.