CAMAGÜEY.- No creo que haya que remitirse a la novela Cándido o el optimismo, escrita en 1759 por Voltaire, el afamado filósofo parisino, nacido en 1694, para comprender el alcance que tiene la prospectiva estratégica para la sostenibilidad de la economía cubana en la era del conocimiento.
Si algún valor tiene esta narrativa en el pensamiento de los investigadores, economistas y académicos, es que François Marie Arouet, también conocido como Voltaire, dibujó en Cándido, discípulo del doctor Pangloss, que el secreto de la felicidad reside en “cultivar nuestro huerto” y cómo a fuerza de soñar es posible viajar a escenarios futuros.
A doscientos sesenta años de estas célebres frases del autor de Cándido o el optimismo, ellas cobran vigencia: “La ignorancia afirma o niega rotundamente; la Ciencia duda”, como: “No hay problema que resista el ejercicio continuo del pensamiento”.
Los actores políticos, gubernamentales y empresariales del municipio Camagüey cuentan, desde la pasada semana, con las herramientas teóricas imprescindibles para el fortalecimiento de las capacidades prospectivas para el desarrollo local, con la mirada puesta en el 2030.
Ello es fruto de una minuciosa investigación, desarrollada durante 18 meses por siete expertos de las universidades de La Habana, Camagüey y de la Escuela Superior para Cuadros del Estado y Gobierno, al amparo de un proyecto, concebido por la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (Anec) y que tiene como principal líder a la Doctora en Ciencia Josefina Torres Mora, presidenta de esa organización en la provincia.
Entre esas prestigiosas figuras de la academia, se encuentra Paco Borrás, un hombre que no se cansa de elogiar a Camagüey, ciudad donde nació. Por razones de trabajo como profesor de la Universidad de La Habana y vicepresidente de actividades científicas de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba, las visitas suyas a aquí son poco frecuentes. Él dentro de lo serio que es, jaranea y salpica humor hasta en los momentos cruciales de sus conferencias magistrales, aunque en la entrevista pareció dejar a un lado esas cualidades para responder con exquisitez a las preguntas.
-¿En qué consiste el proyecto que acaban de presentar ante las autoridades políticas, gubernamentales y empresariales?
- Tiene que ver con el avance de capacidades prospectivas de los actores municipales y con el trabajo de diseño estratégico del desarrollo local, con técnicas de propuestas en todo el campo del conocimiento y para diseñar escenarios futuros, es decir, ver de esos espacios los más probables que deseamos y poder llegar a acciones, proyectos y programas hasta el 2030.
“El trabajo puso al descubierto las variables claves del municipio, desde la eficacia y eficiencia de la gestión del gobierno que dé participación a los ciudadanos y los que estos desean.
“En segundo lugar, la búsqueda de nuevos financiamientos internos y externos para poder lograr el desarrollo del municipio, e incrementar los impactos de la ciencia, la técnica y la innovación económicas en el municipio”.
Según Borrás otros propósitos están asociados con el auge de las telecomunicaciones y la informatización de la sociedad y el turismo, haciendo que los encadenamientos productivos favorezcan los éxitos de ese sector y el desarrollo integrado de la industria agropecuaria y pesquera.
La última estancia en Camagüey del grupo de investigadores se correspondió con la presentación de la versión final del proyecto desde el punto de vista científico. “Lo que parece final es el comienzo de las acciones, de elaborar programas para ejecutar a un corto y mediano plazo”, sostuvo Borrás.
“Es importante decir que no es un proyecto surgido de afuera. Como equipo hemos actuado como facilitadores del pensamiento de los actores camagüeyanos”.
-¿Cómo se proyecta la vicepresidencia de actividades científicas para hacer viable los pronunciamientos del presidente Miguel Diaz-Canel, en el resumen de la visita gubernamental a Pinar del Rio?
“Este proyecto de prospectiva estratégica, realizado en Camagüey, es parte de una estrategia global de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba, de impulsar los resultados científicos, tecnológicos y de innovación de las instituciones académicas y científicas del país, con la participación de los economistas en la solución de los problemas reales del territorio.
“En esto han trabajado mucho la Anec y la vicepresidencia de actividades científicas de todo el país, como muestra de favorecer el desarrollo sostenible ante los retos que tenemos en los territorios, a partir de la autonomía que se le va a dar a los municipios.
“Es que el presidente nos ha pedido hacer varias cosas, grandes desafíos. Yo diría, entre ellos, uno, que los economistas se involucren en la solución de problemas reales de la economía, y otro, el desarrollo de la innovación y la aplicación de los resultados científicos en el mejoramiento de la práctica económica. Estos dos aspectos se cumplen en el proyecto que nosotros estamos desarrollando”.
Como auténtico camagüeyano habló durante el evento de dos días en el Centro de Convenciones Santa Cecilia de las bondades de la Cuna Natal de Nicolás Guillén desde el punto de vista histórico, arquitectónico y patrimonial, de las producciones biomédicas, de la sustitución de importaciones y de nuevas carteras para las exportaciones y en los encadenamientos productivos.
Una de las potencialidades dentro de la prospectiva de Camagüey está la ciudad patrimonial. Foto: Lázaro Najarro/Colaborador