CAMAGÜEY.- Miguel Borroto se prepara para dirigir a los Toros de la Llanura por tercer año consecutivo tras dos temporadas contrastantes que llevaron a gran parte de la afición camagüeyana de la idolatría total al disgusto: “El fanático es así, te quiere o no en dependencia del resultado, es algo que entiendo y con lo que aprendí a vivir hace muchos años porque cuando hay amor al equipo, se ven esos extremos”, confesó vía telefónica este jueves a Adelante.cu, a la espera de un PCR para comprobar que ya estaba negativo al SARS-CoV-2.
“Estoy loco por regresar al terreno, sé que el colectivo de entrenadores está haciendo bien su trabajo, pero vista hace fe. He perdido tiempo por estar con COVID-19, pero lo importante es que los muchachos están cumpliendo con lo planificado. Hubiésemos querido topar un poco más con otras provincias, pero al enfermarse algunos de nosotros, decidimos mantenernos con el modelaje competitivo interno”, agregó.
-Por estos días, en el Cándido González se perfilan los posibles abridores y se utilizan al menos dos variantes de alineaciones. ¿Ya puede hablar de puestos seguros?
-Seguro no hay nada en esta pelota, pero sí hemos organizado la manera en que usaremos a cada jugador. Al tener a Frank Madan fuera de rotación en el inicio y a Pepe (José Ramón Rodríguez) a un 70% de sus posibilidades, hay que ajustar sobre la marcha. Por el nivel tan parejo que han mostrado algunos lanzadores, vamos a probar en rol de abridores a Sebastián Contreras, Lisander Hernández, Pedro Luis Guzmán, Yusney Saborit, Ángel Luis Márquez y Javier del Pino. Cuando ya tengamos a nuestros mejores hombres listos, tres de ellos pasarán a relevar, incluso Lisander podría apoyar a Julio Montesinos en la función de cerrador.
“Reconozco que el año pasado cometimos errores costosos en el manejo del picheo y queremos rectificar. Hemos distribuido las cargas y las responsabilidades para que se respeten los roles y de esta manera ser más efectivos y cuidar los brazos. Muchachos como Alejandro León y Mario Marzo deben acomodar en las entradas siete u ocho y Sorís o del Pino estarían listos para actuar un inning ante tandas de zurdos”.
-Por lo que nos comenta, los jugadores que ha captado en otros territorios asumirían un papel determinante en el conjunto. Sin embargo, algunos aficionados están en contra de que los haya fichado…
-En este debate el terreno es el que dará o no la razón. Si se fijan, yo no he traído a ningún pelotero de otra provincia por capricho. Todos vienen a tapar huecos que se nos han creado. Son peloteros hechos, con experiencia en Series Nacionales y con números no despreciables. Incluso, gracias a ellos veo fortaleza en nuestro cuerpo de serpentineros.
“En un futuro deberíamos pensar en realizar un draft para organizar este tipo de traspasos, así yo podría cambiarle a Matanzas un inicialista por un segunda base o a Pinar del Río un receptor por un lanzador y cada uno tendría la posibilidad de jugar más en equipos con carencias en esas posiciones. Creo que este año no fuimos injustos en la confección de la nómina. Dejamos fuera a Damián Leyva y Adrián Pérez porque no cumplieron nuestras expectativas en los últimos dos años, pero tampoco es el fin para ellos, ya tendrán otras oportunidades”.
-Camagüey ha perdido a Humberto Bravo, Loidel Chapellí Jr. y Leonel Segura, los tres bateadores zurdos de excelencia que abrían la batería, y a Yandy Yanes, quien era el futuro del campo corto. ¿Cómo organizará las piezas para suplir estas ausencias?
-Será muy difícil alcanzar el nivel que teníamos con ellos, porque son bateadores que están por encima de la media de nuestro campeonato. No obstante, mantenemos una de las tandas más fuertes del país. Tenemos un núcleo fuerte desde el tercer al sexto bate con Luis González Azcuy, Yordanis Samón, Alexander Ayala y Leslie Anderson; para el primer turno estamos pensando en Eleazar Lami o Yanmichel Flores y para el segundo en Leonel Moas o Asnier Fonseca. Pero también contamos con bateadores como Jorge Cardosa, Luis Gómez y Yendry Téllez, muy oportunos, y otros como Eglis Eugellés, Jorge Álvarez o Adrián Hernández, muy habilidosos y rápidos para ocupar la parte baja de la alineación ofensiva. Si tuviera que darte un orden para el primer choque pondría a Lami (campo corto), Moas Jr (jardín central), Azcuy (jardín derecho), Samón (primera base), Ayala (tercera base), Anderson (designado), Cardosa (jardín izquierdo), Téllez o Gómez (receptor) y Eugellés (segunda base)”.
-¿Con esas armas, en qué puesto ve a los Toros al finalizar la etapa regular?
-Veo cuatro equipos bastante sólidos: Matanzas, Granma, Las Tunas e Industriales, y luego un grupo que debe pelear por las otras cuatro plazas de play off en el que están Pinar del Río, Santiago de Cuba, Holguín, Ciego de Ávila, Mayabeque y nosotros, que al igual que Sancti Spíritus y Cienfuegos hemos perdido varios peloteros importantes, pero todavía partimos como candidatos. Pero esos son análisis que uno hace, la realidad es más rica y todo se decide juego a juego.
“Esta paridad será muy buena para el espectáculo y todas las aficiones van a disfrutan sus triunfos. Se han cambiado los protocolos y reglas para que el calendario no se detenga demasiado y al menos un 50% de los aficionados pueda asistir a los estadios, pero hay que ser muy disciplinados para lograrlo, porque el coronavirus sigue al acecho. Esta Serie está bien pensada y estoy seguro que será mejor que la anterior, como también estoy seguro que los Toros vamos a luchar con todas nuestras fuerzas para alcanzar el título de Cuba”.