CAMAGÜEY.- La campaña de siembra de frío en la provincia, al igual que en el resto del país, sufre el impacto de las carencias de combustible, fertilizantes y plaguicidas. Ante esta situación urge que los agricultores camagüeyanos hagan un uso más eficiente de los recursos para lograr mejores rendimientos y garantizar la comida del pueblo.
Julio Velázquez Ávila, ingeniero agrónomo y sub delegado de Cultivos Varios en la provincia informó a Adelante Digital sobre la estrategia de trabajo para no detener la campaña, la más importante de la agricultura y donde se garantiza el 60% de la producción del próximo año. Con tal objetivo se privilegiaron con recursos aquellas áreas que van a proporcionar volúmenes considerables de viandas y de hortalizas.
La primera prioridad es la siembra del tomate con destino a la industria, concentrado fundamentalmente en la zona de Camalote, Najasa y Santa Cruz del Sur. En segundo lugar plantar yuca, que aporta directamente al plato de los cubanos y la tercera es el frijol, un renglón decisivo en la sustitución de importaciones. Se trabaja además en potenciar las zonas que poseen sistemas de riegos en Sierra de Cubitas, Esmeralda y Vertientes para cultivos de ciclo corto como boniato, calabaza y col.
A diferencia de años anteriores hoy está garantizada la semilla certificada de estas plantaciones, aseguró Velázquez Ávila. “Tenemos en el territorio 70 mil vitro plantas de alto potencial genético de plátano burro, producidas en la Biofábrica, las de diferentes variedades de boniato obtenidas gracias al trabajo conjunto de la Finca de Semilla de Santa Cruz del Sur y la Estación Experimental del Instituto de Investigaciones de Viandas Tropicales (INIVIT). En el caso de la yuca está el cangre para más de 4 mil hectáreas.
El ingeniero agrónomo reconoció que la clave para sortear las dificultades está en “no perder tiempo, ser eficiente, hacerlo bien para lograr mayores rendimientos en los cultivos y aplicar alternativa ya sea tanto la utilización de bioproductos como fertilizantes y controles biológicos, así como el empleo de la tracción animal para la preparación de pequeñas extensiones de tierra y el acarreo de las cosechas.
La campaña de siembra de frío en toda Cuba inició el primero de septiembre y durará hasta el 28 de febrero.