CAMAGÜEY.- La escuela primaria Rafael María de Mendive de la ciudad amaneció diferente hoy. Por sus puertas no solo entraban pioneros vestidos de uniforme, también lo hacían Meñique, Pilar, Nené Traviesa...Todos querían ser parte de la celebración, del Día Universal del Niño.
Aunque cada año se festejaba la firma de la Convención sobre los Derechos del Niño (20 de noviembre de 1989), en esta ocasión se optó por brindarle mayor protagonismo a los más pequeños de casa.
Mientras que millones de infantes trabajan en muchas partes del mundo o mueren a causa de la malnutrición y enfermedades prevenibles, en Cuba las nuevas generaciones gozan de una atención privilegiada a sus derechos a la Educación, la Salud, la Cultura.
De acuerdo con el portal digital del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), hoy se deben celebrar los avances conseguidos, pero sobre todo es un día para llamar la atención sobre la situación de los niños más desfavorecidos, dar a conocer los derechos de la infancia y crear conciencia de la importancia de trabajar día a día por su bienestar y desarrollo.
Fotos: Orlando Durán Hernández /Adelante /Archivo