CAMAGÜEY.- Aunque agosto comienza a quemar sus últimas “naves”, todavía quedan días para disfrutar de las opciones veraniegas en la provincia, y muchos optan por acogerse a las variables diseñadas en la ciudad, sin tener que moverse a la playa o al campismo.

Los chicos en casa, y las vacaciones laborales, habituales en esta época del año, incentivan las gestiones de las familias por encontrar algún espacio recreativo, y que puedan contribuir al necesario descanso y el sano esparcimiento.

¿El reto?, muy complejo, pues pese a los esfuerzos estatales, no siempre son factibles las ofertas económicas, lo cual aumenta la presión en los servicios, sobre todo de los lugares donde hay piscina o equipos diversos para los infantes, no siempre a un costo asequible.

DE VILLAS Y CASTILLO

Su estructura arquitectónica la asemeja a un castillo, aunque no del tipo de películas, donde hay aburridos reyes, o dantescos personajes de terror. Es una confortable unidad perteneciente a la Empresa Provincial de Recreación y Turismo Santa Lucía.

Bella instalación, bien cuidada; en su interior un colectivo de trabajadores se esfuerza por obsequiarle al visitante una agradable estancia, razón por la cual la Unidad Empresarial de Base (UEB) El Castillito, enclavada en la Carretera Central, esquina a Agramonte, en la barriada de Jayamá, deviene una permanente opción entre camagüeyanos y foráneos.

Heyler Hernández Pacheco, joven y dinámico director, resalta el esfuerzo diario por tener en su menú atractivos platos, y que, además, salgan a la venta con precios accesibles. En la cafetería no extraña encontrar, por ejemplo, bocaditos con un valor máximo de cincuenta pesos.

La piscina es uno de sus lados “fuertes”, a pesar de que sus dimensiones son pequeñas. Por su uso, el adulto paga 100 pesos, y 50 los menores.

“Tenemos habilitados los pasadías con hasta 60 personas, en el horario de 9:00 a.m. a 4:30 p.m. Las reservas son por vía telefónica o presencial. Los visitantes pueden solicitar el almuerzo, con precios desde 220 hasta 410 pesos, que incluye indistintamente carne de res, pollo y cerdo. Si lo desea, el cliente puede consumirlo en nuestro restaurante. Además, tenemos oferta de cerveza Cristal dispensada en el bar, adjunto a la piscina”.

Fotos: Alejandro Rodríguez Rodríguez/ AdelanteFotos: Alejandro Rodríguez Rodríguez/ Adelante

La Villa Azucarera es un sitio muy visitado. Su alberca, la ubicación y capacidad para el alojamiento, le tributan valores adicionales. Julio Toledo, su actual director, puntualiza algunas de las características del centro, que pertenece a la Empresa Provincial de Alojamiento (ALGREC).

“Disponemos de 56 capacidades, con la modalidad de tres días y tres noches, y las reservas pueden solicitarse en el Buró de la institución, situado en el Recinto Ferial. Las habitaciones disponen de televisor, climatización y refrigerador, entre otras facilidades, aunque para este mes ya está cerrado el plan de alojamiento”.

Asumen igualmente pasadías de martes a domingo hasta 60 personas, y tienen entre sus prioridades la atención a sectores como Salud, Educación, INDER y Comunales. Su línea económica permite adquirir almuerzo por un monto de 250 pesos, e incluye pescado de mar frito, arroz, ensalada y vianda. Los visitantes tienen acceso al bar, con una amplia línea de cocteles, parrillada y cafetería con alimentos ligeros como bocaditos y refrescos.

Otras nuevas modalidades se suman para “endulzar” el gusto a sus concurrentes. Entre estas figuran la Noche Camagüeyana, presentaciones para el público infantil los domingos, y para satisfacer a los amantes de la llamada década prodigiosa los miércoles.

“Hemos agregado la caja extra, para extraer efectivo en un monto de hasta 5 000 pesos, como una facilidad adicional para los usuarios”.

PARQUES EN EL MENÚ

Entre los más acogedores de su tipo en el país, el parque de diversiones Camilo Cienfuegos sigue siendo un obligado sitio de visita para grandes y pequeños, a pesar de sus 47 años.

Humberto Rodríguez Castillo, o Moreno, como usualmente le llaman, es un conversador exquisito. Después del saludo, no hubo ni que preguntar: “Nos sentamos, o te respondo caminando”. Un asiento próximo, en medio de la verde floresta que nos acompaña, resulta un oasis en estos días de intenso calor…

“Ahora en el verano, trabajamos de martes a domingo, de 9:00 a.m. a 5:00 p.m., y con casi todos los equipos de alta, salvo La Taza, que ya se resiente por los muchos años de explotación, y hay que acudir a la inventiva para reanimarla.

“En la piscina se ha trabajado, y esperamos que este fin de semana ya los niños puedan darse el chapuzón”.

Tras concluir algunas gestiones propias de sus funciones, Ariel Cabrera López, el director, se suma al intercambio.

“Junto a las actividades propias nuestras, hay presentaciones con talento artístico los sábados y domingos, con un perfil diseñado para niños. Comienzan en esos días sobre las 11:00 a.m.”.

“Se ha tratado de que la mayor parte de lo que se vende sea estatal, aunque también le hemos dado espacio a otras formas de gestión de la economía, pues en verano llegan a nuestra instalación entre 1 000 y 1 500 personas, una cantidad apreciable, que demanda de una buena logística.

“Con respaldo de la dirección de la provincia hemos logrado conformar módulos de confituras para los niños, con precios aceptables, y variedad de productos”.

Pese a su lejanía, y la falta de transporte para su disfrute, en el Jardín Botánico una pequeña alberca presta servicios a grandes y chicos, una buena variante para disfrutar de la tranquilidad de la zona.

Yainier Sardiña, el administrador, afirma que han logrado una asistencia sistemática y no faltan quienes la prefieran para pasar un día en familia o con amigos.

Próxima al restaurante La Cueva, que le proporciona los almuerzos, el dependiente, Ramón Sardiñas, explicó que los interesados pueden reservar presencialmente o por teléfono. Con capacidad para 30 personas, el valor del total del alquiler es de 1 500 pesos. “Además de pizzas, tenemos refrescos, maltas y cerveza en botella…”.

El ZOO Y LA GLORIETA… TAMBIÉN EN VERAN0

En pleno Casino Campestre se halla el Zoológico de Camagüey, una dirección muy popular que, sea o no etapa estival, suele atraer un numeroso público, no solo de infantes, porque adultos de todas las edades lo utilizan como un referente para el esparcimiento.

Es uno de los 22 existentes en el país. Aunque no se ubica entre los más grandes, sí resulta de los más visitados, reconoció Eddy Rojas Garay, director de la UEB Parque Zoológico, perteneciente a la OSDE Flora y Fauna.

“Durante el verano estamos abiertos toda la semana, comenzamos a las 9:00 a.m. y cerramos a las 4:45 p.m. Disponemos de 767 ejemplares y 74 especies, y para atender al público contamos con dos cafeterías (una para los transeúntes), restaurante, parrillada, guarapera, punto para venta de pizzas, tiendas de juguetes, y acuario”.

Hasta el momento, en el período de julio y agosto han pasado por la instalación entre 10 000 y 12 000 personas. El precio de acceso es de 10 pesos los adultos, y cinco los menores. Las actuaciones artísticas los sábados y domingos constituyen un regalo adicional, “que ha sido bien recibido”, manifestó el directivo.

Para Jorge Luis García, un chico de apenas 9 años, es su primera visita a un Zoo. No es camagüeyano. “Vinimos a ver a unos familiares, y mis padres me trajeron. Me gustó mucho”.

Muy cerca se asienta la UEB La Glorieta, de la Empresa Municipal de Restaurantes y Centros de Recreación, en la conocida unidad El Emperador, que dispone en un espacio interior de un pequeño centro recreativo para niños y adultos.

El impacto inicial ha sido positivo, según el criterio de su directora, Nadia Valdespino. La entrada es por reservación (teléfono 32-722223), al precio de 6 500 pesos, para unas 15 personas como máximo.

Con una casi inminente remodelación en todas sus áreas, la unidad no ha cerrado. Mantiene vitalidad, refirió Yaumara Copelán Velazco, técnica en Gastronomía, se han aumentado las ofertas al sumar pizzas y espaguetis con variados surtidos; un kiosco expende comida para llevar y en la zona del picnic se pueden adquirir almuerzos.

“Ahora estamos mejorando la visualidad exterior, pero haremos muchos cambios para mejorar nuestro centro, y así brindar un servicio superior, como el pueblo se merece”, manifestó sonriente Valdespino.

Estas son solo algunas de las “recetas de verano” más viables en la urbe citadina, y una modesta guía para sortear los rigores de un caluroso agosto que en cuestión de días… será historia.