CAMAGÜEY.- ¡Borroto y cuenta nueva!, se dice en esta tierra cada vez que el experimentado director regresa al puente de mando de los Toros de la Llanura, la principal nave del béisbol camagüeyano. Quizá como nunca la frase ha caracterizado el inicio de sus equipos en Series Nacionales. Y no me refiero solo al hecho de que lleguen mañana al “Cándido González” en el primer lugar de la tabla con inventario de cuatro ganados y uno perdido, sino a la positiva metamorfosis de la plantilla que en los últimos dos torneos se empantanó en el puesto 12.

El arranque ante Mayabeque en el estadio Nelson Fernández no pudo ser mejor: tres victorias al hilo con 21 carreras anotadas y nueve permitidas. En tierra de Huracanes debutaron a lo grande Loidel Chapellí Zulueta, héroe del primer juego al empujar la que decretó el triunfo 7-6, y Carlos Luis Espinosa, quien se anotó la victoria en el segundo tras lanzar cuatro entradas sin permitir carreras y solo un hit.

El colega Luis Florencio Rodríguez nos recuerda tres detalles significativos de este inicio: Camagüey no ganaba el primer juego del campeonato desde la 56 SNB (2016-2017); no propinaba una barrida desde que en la 57 le ganó a Guantánamo, los días miércoles 30, jueves 31 de agosto y viernes 1ro. de septiembre del 2017 en el estadio Nguyen Van Troi; y no abría con una subserie de 3-0 a su favor desde la campaña 47 (2007-2008), cuando le pasó la escoba al conjunto de la Isla de la Juventud.

Frente a Matanzas llegó el primer revés, por la dolorosa vía del nocao 17-7, pero fue un juego en el que la ofensiva conectó 11 hits y no se cometió error defensivo. Sin embargo, en el segundo choque de esa jornada, pactado a siete entradas por el nuevo reglamento, los nuestros tomaron desquite con pizarra de siete por tres, con ataque de 10 inatrapables y labor combinada de cuatro lanzadores. El duelo no se completó al suspenderse el último enfrentamiento por las malas condiciones del terreno.

“El Jerarca” Borroto ha implantado su estilo. Casi todos los jugadores de posición participan en un juego para aprovechar sus cualidades. Son constantes los intentos de robo de bases (salieron seis y llegaron cuatro), las jugadas de corrido y bateo, y cada integrante del bullpen tiene definido su rol. Así de renovados llegan los Toros a su llanura, que seguramente abarrotarán de seguidores su estadio para continuar impulsándolos, con el sueño de hacer, en esta campaña, sus mejores cuentas.