A cinco años del deceso del Comandante en Jefe se sigue hablando en presente de él. Pensar en su muerte aun teniéndolo vivo fue una encrucijada que solo se podía abordar desde el silencio. De la voluntad póstuma en contra del culto a su personalidad se sabe desde 2016, pero poco se ha dicho de las circunstancias y los hombres implicados en este proyecto gestado en la Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte. Adelante.cu cuenta hoy parte de esa historia.