El alzamiento de Santiago de Cuba el 30 de noviembre de 1956 fue planeado en apoyo al desembarco del yate Granma, tras llegar la contraseña acordada en forma de telegrama: “Obra pedida agotada. Editorial Divulgación”, la cual era el anuncio de la salida de Tuxpan del barco que traería a Fidel y a los expedicionarios.