CAMAGÜEY. Desde hace varios años, esta ciudad suma instituciones recreativas. Basta con montar el ómnibus local de la ruta 14 y comprobar, sin embargo, cuánto falta por pulir para concretar de veras el sueño de esparcimiento que impulsó esas obras.
MANTENER EL SUEÑO DE UN LAGO
Era la primera vez que Maritza Reyes Martínez visitaba El Lago de los Sueños. “Qué lástima ver tan poca gente, quizá sea por el transporte o porque no se conoce la variedad de ofertas”, nos dijo mientras esperaba una pizza familiar en “La Napolitana”.Melba Toledo, quien caminó junto a los suyos desde La Mosca en busca de un domingo diferente, refirió que en la heladería “hay diversidad de opciones, pero no de sabores”.No encontramos mucho más público.
En un sitio pensado para todas las edades, a las 11:00 a.m. de un domingo solo habían entrado 46 personas. El portero asegura que la asistencia ha decaído, ahora que hay más sombra y espacios donde pasarla bien.“El Lago de los Sueños, la calle República y los puntos vitales tienen prioridad en los recursos que distribuimos, pero falta integración de otros organismos”, explicó Ismael Jorge Rodríguez Correa, director de la Empresa Municipal de Gastronomía.
Uno de los principales atractivos, si funcionara de manera estable, sería el recorrido en lanchas hasta el Parque Botánico, que debiera protegerse a pesar de la restricción de combustible.
Más allá de los contratiempos, las siete unidades buscan mantener ofertas de calidad a precios asequibles. En la cafetería La Herradura, por ejemplo, el jueves 22 de agosto había 18 productos sólidos en la tablilla, además de la muy demandada cerveza Tínima y otros líquidos. Nada de refresco enlatado Ciego Montero. “Se debían recibir veinte palés y en lo que va de mes solo han entrado cuatro. A base de bocaditos no se cumple”, enfatizó Rodríguez Correa.
Con la intención de atraer público, “La Herradura” acoge los domingos actividades para los niños. Tres modalidades de pollo, cerdo en bistec, costilla ahumada y asado, además de res, son las principales ofertas del restaurante La Casa del Campesino, donde lo más caro cuesta 35 pesos. Los domingos ofrecen la Amorosa Guajira, que cuenta con cerdo asado, cerveza y chicharritas, buena opción para compartir en grupos. La administradora, Adiamela Paredes García, aseguró:
“Para mantener nuestros productos ‘estrella’ se nos protege con la entrada de recursos”.“La Pista” resulta otra propuesta hasta las 7:00 p.m. Allí brindan pollo y cerdo asado, y cerveza de termo para quien no pueda “llegarle” a la embotellada de diez pesos.
En “El Expreso” ofrecen hamburguesas, tortillas y bocaditos de queso, más los líquidos disponibles, según los surtidos de la Empresa. “Aunque en esta etapa las preferencias de la población son otras, nuestra pretensión es que el público se sienta bien atendido”, argumentó su administrador, Elacio Reyes Caraballos.
Ocho variedades de pizzas, incluidas las de pescados y mariscos, y siete de espaguetis, son las opciones de “La Napolitana”, asegura su administrador, Ernesto Gómez Ramírez. Para el verano han contado con la materia prima necesaria: queso frescal de muy buena calidad y harina. Su principal afectación son los insumos, fundamentalmente los vasos.
Arroz con pescado, con camarón, pescado frito, enchilado y cóctel de camarón se sitúan en la preferencia del público en “El Barco”, especializada en pescados y mariscos. Un enchilado de camarones cuesta 24 pesos, cuando en otros sitios puede triplicarse el precio.
Emblemática resulta la creme-ría Avión 1514, cuyo mayor atractivo es el AN 24 que funciona como salón. Actualmente no se utiliza por problemas con los aires acondicionados, realidad que alarma más pues el Grupo Empresarial cuenta con un taller para esos equipos. La intención de estabilizar cuatro sabores de helado y siete combinaciones, incluyendo dos con dulces, de-pende de la disponibilidad de la fábrica Coppelia. Facilita el trabajo tener un pequeño centro de elaboración, de donde salen los dulces, sin necesidad de trasladarlos desde el centro de la ciudad.
La administradora, Grisel Rodríguez Lee, comentó que a pesar de que la afluencia no ha sido tanta y la fábrica estuvo rota, el plan de agosto está al 92 %, pues “casi todos los que entran al Lago llegan hasta acá”.
Más de un millón de pesos costó convertir la presa de Montecarlo en El Lago de los Sueños. La Empresa Municipal de Gastronomía se esfuerza por mantener la instalación, aun cuando no cuentan con presupuesto para reparaciones. En el mundo, esos sitios requieren renovaciones cada cierto tiempo para mantenerse comercializables. Muy bien vendría pensar en una piscina y en un parque infantil, atractivos que podrían devolver a El Lago de los Sueños la concurrencia de sus primeros años.
UN PARQUE QUE SE SUEÑA JARDÍN
Meysel García visita con frecuencia el Parque Botánico, sobre todo la piscina Coco Loba. El último domingo abordó la ruta 14 para disfrutar del paisaje y cumplir el deseo de baño de su niña. “Está muy limpia y hay ofertas gastronómicas de calidad, con buenos precios”. Mas para Blanca Betancourt falta vender confituras, “¿cómo no comercializarlas en un espacio para los pequeños?”.
A propósito, el director municipal de Gastronomía, Rodríguez Correa, explica que la Empresa Confitera Camagüey no produce en estos momentos, y Daniel Iglesias Guzmán, vicepresidente del Consejo de la Administración Provincial, confirma que la fábrica tiene como prioridad las pastas, y el sorbeto va para el parque Camilo Cienfuegos.
“Tenemos la suerte de que las ocho unidades gastronómicas estén abiertas. La Cueva ha privilegiado el picnic; en La Guajirita hemos contado con el pollo y el cerdo; recuperamos El Centralito, por mucho tiempo cerrado. Además, nuestra residencia científica se convirtió este verano en villa para la FEEM y ha recibido a jóvenes de todos los municipios. Somos el único Botánico en Cuba que tiene en su interior un Joven Club y no se aprovecha como debiera ser”, alertó Lázara Rivero García, directora del Parque.
Se trabaja para educar al público en las regulaciones que tiene en lugar como este, sobre todo por la aspiración de convertirlo en Jardín. Para el 2020 se prevé iniciar un mariposario. “En Cuba solo hay uno en la Quinta de los Molinos; construiremos el segundo del país. Por la parte botánica contamos con 125 familias, 959 especies y más de 3 000 árboles, en los que sobresalen los de nuestra región”, agregó.
Miguel Arias Vázquez, subdirector de operaciones de la Empresa Provincial de Transporte, aseguró que a pesar de contar solo con el 40 % del combustible, la ruta 14 se ha protegido y está al 80 % de disponibilidad.
Pero el empuje de botánicos y gastronómicos no basta. Hay una palabra clave: integración; el fomento de alianzas con otras instituciones resulta vital para lograr lo que el público espera de El Lago y el Parque Botánico, dos espacios formidables de inversiones millonarias, donde citadinos y visitantes, en cualquier época del año, puedan recrearse de manera sana.