LA HABANA.-  Una de las especialidades médicas más afectadas por el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba es la oncología, por ser el cáncer la segunda causa de muerte en este país caribeño, enfermedad que en el último año cobró aquí la vida de casi 25 mil personas.

El daño es permanente: los medicamentos de última generación de producción estadounidense están vedados, y hay fármacos destinados a los tumores malignos más frecuentes, dijo a la Agencia Cubana de Noticias el doctor Lorenzo Anasagasti Angulo, jefe del departamento de Docencia e Investigación del Instituto de Oncología y Radiobiología, en la capital.

Según el doctor, el cerco estadounidense entorpece la adquisición de aparatos indispensables para el tratamiento y diagnóstico de esa enfermedad, y en ocasiones el vendedor sugiere que no se divulgue porque eso le puede acarrear consecuencias a largo plazo.

Añadió que existen otros dispositivos que no son de EE.UU. pero poseen un porcentaje de componentes de ese país, y para que el proveedor los pueda enviar a Cuba debe iniciar el proceso de licencia, que resulta bastante lento y complejo.

Aunque al final se logra, pasa un buen tiempo y eso periódicamente requiere de renovación, aclaró el experto.

Esa política hostil sigue perturbando el intercambio científico, aseveró el catedrático, pues frecuentemente se reciben notificaciones de médicos y profesores norteños interesados en participar en eventos, y después no pueden asistir porque aplican leyes que se lo impiden, como el bloqueo de sus tarjetas de crédito.

Como ejemplo de ello, comentó que recientemente tuvo lugar en Varadero un Taller internacional sobre el uso del Heberferón para el tratamiento del cáncer de piel, un producto cubano, al que habían confirmado su asistencia varios científicos de EE.UU.

Pero no pudieron venir, incluso una llegó a La Habana y del mismo aeropuerto retornó a su nación al no lograr hacer uso de su tarjeta bancaria, pues en Estados Unidos se la bloquearon, subrayó Anasagasti Angulo.

Esa experta fue muy consciente, envió su conferencia y manifestó que la podían compartir libremente con todos los participantes, lo cual demuestra la calidad humana, pero se alteró el programa que tenía el taller, acotó.

Otros colegas coterráneos suyos asistieron a la cita, indicó, pero no pudieron establecer lazos de colaboración con sus centros aun cuando en La Habana se identificaron puntos de contacto y de interés de relaciones.

Según el médico cubano, el HeberFERÓN para el cáncer de piel no melanoma (muy frecuente en Estados Unidos) y el Heberprot-P, para las úlceras complejas del pie diabético, pudieran favorecer a muchos estadounidenses.

Advirtió que el gobierno de Donald Trump está dando los pasos para impedir a los ciudadanos de ese país que se traten en Cuba con las vacunas para el cáncer de pulmón, otro daño más a ese pueblo, lamentó el doctor.

Para paliar las carencias, Cuba realiza ingentes esfuerzos y el mayor es la agudeza en el manejo del diagnóstico de los casos, y también aumentar la precisión de los tratamientos y beneficiarnos más de los productos desarrollados en el país, concluyó el entrevistado.

Desde abril de 2018 hasta marzo de 2019 las afectaciones del bloqueo en la salud cubana son incuestionables, y ascienden a 104 millones 148 mil 178 dólares, cifra que supera en seis millones 123 mil 498 dólares a la del año anterior, según un informe que la próxima semana presentará Cuba ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.

El documento, titulado "Necesidad de poner fin al bloqueo económico comercial y financiero de los Estados Unidos de América contra Cuba", refiere que en el caso de la oncología se contactó con varias empresas estadounidenses con vistas a la compra de fármacos novedosos destinados al tratamiento del cáncer y hasta el momento no se ha obtenido respuesta.

Cuentan entre los medicamentos requeridos el Crizotinib, empleado para el tratamiento del cáncer de pulmón; el Palbociclib, para el de mama metastásico hormonosensible; y el Sunitinib, eficaz y único existente en el mundo para el carcinoma renal avanzado o con metástasis.