CAMAGÜEY.- Con una matrícula superior a los 116 000 estudiantes comenzará el próximo 7 de marzo el curso escolar 2021-2022 en la provincia. El inicio de las clases se efectuará en dos etapas, teniendo en cuenta las fechas de culminación de estudios de cada una de las enseñanzas.

Los primeros en entrar a las aulas serán los alumnos de Secundaria Básica, Preuniversitario, Enseñanza Técnica y Profesional, Pedagógica y los de la Educación de Jóvenes y Adultos, y una semana después se incorporarán los pequeños de Primera Infancia, Primaria y Educación Especial.

En esta ocasión funcionarán 693 centros docentes, número que se incrementa respecto al año anterior, pues como particularidad, habrá escuelas de idioma en seis municipios y reabrirán cinco escuelas primarias rurales multígrados en Guáimaro, Nuevitas, Najasa y Camagüey.

Al referirse a la continuidad de estudios, Mercedes Escuredo Olazábal, directora provincial de Educación en Camagüey, aseguró que la totalidad de egresados de 9no. grado (6 740) tienen garantizadas sus plazas. De ellos pasarán a la enseñanza preuniversitaria 2 855 y el resto de la matrícula iniciarán en la formación técnico-profesional, incluida la pedagógica con 570.

La directiva explicó además que se mantendrán la semana de receso docente de abril, del 18 al 23, y las vacaciones para maestros y alumnos del 28 de julio al 27 de agosto. El curso se reanudará el 5 de septiembre y está previsto culminarlo el 19 de noviembre.

En igual fecha finalizarán los educandos de Jimaguayú, Najasa, Sierra de Cubitas y Santa Cruz del Sur, quienes empezaron el curso desde el 4 de enero.

Aunque se conoció que en las aulas existirá un déficit de 779 maestros, se aseguró que ningún alumno dejará de recibir sus clases. Continuarán aplicando las mismas modalidades que en etapas anteriores, incluido el contrato por horas a estudiantes universitarios.

Contar con una cobertura docente de un 96 % obliga a tomar medidas, sobre todo con las asignaturas que presentan mayores necesidades: Español, Historia y Matemática.

Dentro de las premisas para el nuevo período lectivo destaca la revitalización de los principios fundacionales del Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas (IPVCE) Máximo Gómez Báez, centro creado por Fidel Castro para formar personas de ciencia. En ese sentido se trabaja en una mayor vinculación con los organismos y empresas del territorio que favorezca la formación vocacional de los estudiantes.

También en este curso escolar se tratará de restablecer la presencialidad y los horarios normales como antes de la pandemia de COVID-19, siempre cumpliendo con las medidas orientadas por el Ministerio de Salud Pública. Solo 26 instituciones de primaria de un total de 454 en toda la provincia, necesitan aplicar variantes en la organización escolar por el requisito de distanciamiento.

Con respecto a la base material de estudio, la directora provincial dio a conocer que hasta la fecha se tienen asegurados los lápices y las libretas, estas con un ajuste de normas que disminuirá su número. Durante el avance del curso deben recibirse los cuadernos de trabajo, los registros de evaluación y asistencia y los expedientes acumulativos, recursos en falta hoy.

Otro tema de interés y preocupación resulta la distribución, venta y uso del uniforme escolar. Vale precisar que por el momento solo los muchachos de nuevo ingreso tendrán acceso a las piezas correspondientes a los diseños de estreno. La orientación es que los continuantes utilicen los que ya poseen, con las excepciones que autoricen las direcciones de las escuelas.

En la medida que el país adquiera materias primas y avance la producción, se realizará la venta para los de segundo, tercero y cuarto grados de primaria; octavo, onceno, y segund o año de las enseñanzas técnica y pedagógica.

“En el caso de Camagüey —aclaró Mercedes Escuredo— aún no hemos podido venderles el uniforme a todos los que pasan de un nivel educativo a otro, pues la industria estaba completando las prendas y distribución. En estos momentos, primaria y secundaria avanzan, comenzó el proceso en educación técnica y formación pedagógica y luego será en preuniversitario”.

Sobresale entre los retos para el nuevo calendario docente aplicar con éxito las adaptaciones curriculares sin reducir contenidos ni afectar el cumplimiento de los objetivos de cada asignatura, grado o disciplina. La brújula apuntará también al perfeccionamiento de la comunicación con los jóvenes y sus familiares y al desarrollo de formas novedosas para que el alumno pueda construir su propio conocimiento, logre aprender, promover, crecer.