CAMAGÜEY.- Mipymes comienza a ser un vocablo que se expande como un ente dinamizador de las fuerzas productivas, una nueva forma de gestión tanto de actores estatales como privados que inciden en el desarrollo económico del país.
Hace pocas horas, el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) anunció la aprobación de las primeras 35 micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), luego de la entrada en vigor el 20 de septiembre de las normativas jurídicas para regular su creación y funcionamiento al amparo del Decreto-Ley sobre esas organizaciones publicado el pasado 7 de agosto.
Dentro de ellas, la pionera de la provincia, con carácter privado y objeto social de producción de alimentos operará con el nombre comercial ChefMigue. Es la única camnagüeyana aprobada dentro del grupo inicial en el que priorizaron esa actividad estratégica, junto a la manufactura, el reciclaje y el desarrollo científico-tecnológico.
Miguel Ricardo Sánchez González, titular del proyecto integrado por cuatro socios, todos familia, declaró a la prensa que está en fase de tramitación la adquisición en el exterior del equipamiento para la fábrica productora de macarrones, fideos, alcuzcuz y otros derivados de la harina, tanto secos y frescos como rellenos. Migue, como le conocen, posee una vasta experiencia en este campo, adquirida durante su formación como chef en Italia, trabajador del sector turístico, cuentapropista y especialista en gastronomía en la Empresa Provincial de Alojamiento, entidad que le arrendará el local para la instalación y funcionamiento de su emprendimiento.
Concretada la aprobación como primer paso, mediante solicitud directa al MEP y con la contribución del proyecto conocido como Coco --asesoría de negocios en tres grandes líneas: incubación, acompañamiento contable y formación de capacidades y competencias-- ahora pueden proceder a su constitución como persona jurídica, el establecimiento de los nexos con las entidades bancarias, importadoras y otras, y cumplir con agilidad los requisitos correspondientes para llevar a feliz término su creación y puesta en marcha como parte del perfeccionamiento de los actores económicos y sus diversas formas de gestión, a fin de desatar su potencial y contribuir al desarrollo de la nación.