Foto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteFoto: Leandro Pérez Pérez/AdelanteCAMAGÜEY.- Roberto Villa Gómez es uno de los fundadores y todavía miembro y presidente de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (Anir) de la Empresa Agroindustrial de Granos Ruta Invasora, de Vertientes, y uno de los 17 delegados camagüeyanos a la II Conferencia Nacional.

Con vasta experiencia habla de los resultados de su empresa, que aclara, es provincial y repara en la UEB de Servicios Técnicos todo lo relacionado con las maquinarias, además de que se hacen las piezas de repuesto.

“El molino Tato Rodríguez Vedo, uno de los más grandes de Latinoamérica, funciona también gracias al resultado de nuestras innovaciones, fundamentalmente en lo que concierne al pelado de arroz para la canasta básica.

“Asimismo sucede en Vertientes con las turbinas para riego instaladas en los polos productivos de Guayabal y Santa Justa, mientras en La Forestal, en Santa Cruz del Sur, se hace una minindustria por los innovadores para procesar mango”.

--¿Lo acompaña la juventud?

--Tenemos las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ) que son el relevo. En el Fórum a nivel de empresa presentaron 99 trabajos y de ellos 15 resultaron Relevantes y se presentarán al evento en la provincia.

Su trabajo ha contribuido, sin dudas, a que Camagüey se mantenga entre la vanguardia del país. A más de 60 millones asciende el aporte de los innovadores de la provincia a la economía cubana en materia de sustitución de importaciones, recuperación de piezas de repuesto, equipos y portadores energéticos.

Como parte de la delegación camagüeyana a la II Conferencia Nacional, apoya el reclamo  que ya llevaron a la Primera y hoy sostienen: adecuar el artículo 43 de la Ley 38 de Innovación y Racionalización de manera que se modifique la remuración a los innovadores por sus aportes, pues consideran que el pago es bajo respecto a como está la vida de hoy, muy diferente a la del año 1976 cuando surgió el documento.