Foto: Cortesía de Omar González CatáFoto: Cortesía de Omar González CatáCAMAGÜEY.- El Proyecto Sociocultural eJo cumple hoy 19 años. Llega consternado por la pérdida reciente de uno de sus pilares, Julio Enrique Hernández Figueredo, pero justo en el dolor encuentra el aliento para seguir desde esta ciudad.

“Es difícil que no se note la ausencia. Juntos escribimos el proyecto, lo discutimos y lo fundamos con la satisfacción de entrar por la puerta ancha, porque quien vino a inaugurar el proyecto fue el comandante Juan Almeida Bosque”, cuenta Omar González Catá.

El público y la comunidad ganaron su desvelo, debido a la desidia y las fluctuaciones de espectadores. Esa preocupación compulsa a no cruzarse de brazos, afirma Indira Martínez Rodríguez, especialista de programación.

La primera sede fue La Casona frente al teatro Principal, y luego pasaron a Ignacio Agramonte, número 277. Desde allí modelan las maneras visibles del homenaje permanente. “Nos trazamos hacer un proyecto cultural, con pensamiento, donde cada cosa tuviera un porqué, y así lo mantendremos”, enfatizó Omar, director de eJo.

Julio Hernández falleció el pasado 25 de agosto. Aunque estudió Derecho se dedicó al trabajo de manualidades. De hecho, fue fundador de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas y conversó mucho acerca de la relación de la artesanía y la legalidad.

Obras suyas se encuentran en instituciones, museos y colecciones particulares de Cuba, Santiago de Chile, España, Gran Bretaña, México, Venezuela, Estados Unidos, Martinica, Holanda, Canadá, Italia, Puerto Rico y otros países.

Su sello también quedó en diseños y ambientaciones del Gobierno Municipal de Camagüey, la cafetería Las Ruinas, en accesorios y atrezo para Medea y Grand Pas de Quatre Yoruba, dos coreografías de Alberto Alonso para el Ballet de Camagüey.

Julito, como popularmente lo llamaban, mereció la Distinción Espejo de Paciencia, la Medalla Raúl Gómez García, y varios reconocimientos como gestor cultural, como el de la Editorial Gente Nueva por el éxito del pabellón infantil en la Feria del Libro.

En el Proyecto eJo impartía los talleres de papier maché, hábitos de vida sana, Tai Chi y rehabilitación de personas con discapacidad mental. Creó la Jornada de Arte Erótico y cofundó las bienales de Pequeño Formato y de Narración Oral, entre otros espacios.

Fue una decisión unánime la de nombrar Julio Hernández in Memorian, la Bienal Nacional de Artes Plásticas de Pequeño Formato, a la altura de la novena edición, prevista del 4 al 7 de diciembre.

Los creadores, sean profesionales o no, pueden concursar con un máximo de tres obras bidimensionales de tema libre, con el mínimo de 10 centímetros por el lado más pequeño y el máximo de 25 centímetros por el mayor. El plazo de admisión vencerá el 22 de noviembre.

En cuanto a las opciones del Proyecto eJo, Indira confirmó que abre los domingos con los ritmos de la Década Prodigiosa, ofrece los sábados el taller de artes plástica, retomará los talleres de papier maché y origami, dedicará octubre a la Jornada por la Cultura Cubana, y reanudará en noviembre las clases de narración oral.