CAMAGÜEY.- Esta es la pretemporada más sui géneris que muchos recuerdan en el béisbol camagüeyano, algo que ya se veía venir por la dilatación del inicio de la Serie Nacional, la imposibilidad de realizar campeonato provincial y las bajas que ha sufrido el equipo en este tiempo. Sin embargo, otros condimentos se han agregado a la receta para hacerla más extraña y atractiva.

Abrir las puertas del estadio Cándido González es uno de los elementos más aplaudidos porque brinda la oportunidad a los aficionados de participar desde el primer momento en el proceso. Según el manager Miguel Borroto, significa “ganancia para todos, porque la gente se divierte y ve quiénes están en mejores condiciones para hacer el equipo, y los atletas más jóvenes se van acostumbrando al rigor de jugar con la presión de la grada”.

Coincido con el timonel y aplaudo esta iniciativa, mas considero que falta organización y exigencia en el graderío, pues muchos han olvidado que la COVID-19 está al acecho aún y se amontonan o bajan sus mascarillas para conversar. Hasta el momento no se ha recibido una concurrencia mayor del 40%, por lo que sería perfectamente posible que las autoridades demanden al menos el tan necesario distanciamiento físico.

Regresando a lo meramente deportivo, tanto los topes internos como los amistosos que se efectuaron esta semana ante Las Tunas arrojaron algunas luces interesantes sobre las sombras de las ausencias. En los jardines se han visto muy bien los prometedores Christian Martínez y Liván Fajardo, este último desbordado a la ofensiva y mostrando poder en sus muñecas. Ambos parecen ganar terreno para acompañar a establecidos como Leonel Segura, Leonel Moas Jr., Luis González, Yanmichel Flores y Jorge Cardosa en la lista definitiva.

En el cuadro, si bien Liban Amaro y Eleazar Lame están respondiendo a la confianza del cuerpo técnico, todavía hay que trabajar mucho en defensa, principalmente en los tiros a la inicial. Otros como Leonardo Casado o Sammy Caldés, de quienes la afición espera mucho en el futuro, tienen que demostrar mucho más que lo que están haciendo hasta el momento para competir por un puesto con hombres como Yosbel Pérez, Adrián Hernández o Eglis Eugellés.

Esta semana el Borroto conversó con la prensa sobre Leslie Anderson y Alexander Ayala, jugadores de peso dentro del equipo que no han comenzado a entrenar. “A Lele le dimos unos días para que descansara y disfrutara con la familia porque estuvo enfermo de dengue y quedó bastante afectado. Ayala recibió un permiso para resolver algunos problemas en casa, pero ya le comunicamos que necesitamos que se incorpore”, informó.

El Jerarca también conversó sobre su decisión de poner sobre el box en los últimos partidos de confrontación a varios lanzadores que ni siquiera están en la nómina de la preselección. "Este año la lista se hizo en base a un escauteo de cada municipio porque no hubo competencias de las que pudiéramos sacar talentos. Por eso también estamos invitando a algunos que quedaron fuera y es posible que los subamos, porque se han visto más preparados que varios de los que están en los entrenamientos", explicó. Él se refiere a muchachos de la academia provincial como Luis Mario Macías, Fernando Ramos o Yerandy Vizcay, con buenas presentaciones ante los Leñadores.

Además, las primeras impresiones que han dejado los habaneros Alejandro Pérez, Javier del Pino y Julio Montesinos son buenas. Pero las mejores sensaciones llegan de los brazos de lanzadores locales como Riquelme Odelín, Mario Marzo o Marlon Soriano, pues parece que han aprovechado al máximo el tiempo de pandemia para mejorar sus armas. No obstante, se mantiene la preocupación sobre el restablecimiento de brazos importantes como los de Roger Trenchs y Adrián Pérez, llamados a tomar el protagonismo en la temporada. Y más lamentable resulta que todavía a Frank Madan no le hayan completado los exámenes en La Habana, gestión que no puede demorar más si queremos contar con el mejor pitcher del staff.

Lleno de detalles, como el famoso programa de televisión, está el entrenamiento de los Toros a la 61 Serie Nacional. Algunos positivos y otros no, pero con arduo trabajo, desde el primer día, para devolver a Camagüey a la postemporada.