Valía y vale la pena visitarlo por la calidad, originalidad y el buen gusto de los platos y saborear aquellos pollos fritos que antaño muchas familias degustaban y propagandizaban entre vecinos, amigos y compañeros de trabajo.

El colectivo, integrado hoy por nueve socios, se ha convertido en la nave insignia de las cooperativas no agropecuarias a partir de entidades del turismo, esa nueva forma de gestión que se abre paso a la luz del perfeccionamiento del modelo económico cubano y por la que apuesta el Estado.

Contra viento y marea iniciaron el cambio, sin desanimarse. Las imperfecciones, tanto las que se derivan de factores externos como las internas, de establecer prioridades en la fórmula costo-beneficio irán corrigiéndose sobre la marcha para que las cooperativas triunfen.

La reunión resumen de la IX Comprobación Nacional de Control Interno, auspiciada por la Contraloría General de la República, fue el escenario propicio para debatir en un ambiente reconfortante a lo que cada cual le toca.

No se subestimó en la necesidad de tener presente la tasa de pago por arrendamiento de diez CUC por metro cuadrado que consume el 84% de los gastos mensuales anteriores al pago del impuesto, de acuerdo con la tarifa establecida por el Ministerio de Turismo.

EL RETO DE APROVECHAR LAS OPORTUNIDADES

Hasta donde conozco, el precio del arrendamiento no puede ser uniforme, incluso, dentro del mismo perímetro urbano. No es igual El Pollito en el Centro Histórico de la ciudad, que en la periferia.

Ese principio del régimen tributario se aplica en el pago de los impuestos por anuncios, según el lugar. Resuelta esta problemática será más fácil acceder a nuevos proveedores. El principal que es la firma Palmares hasta este minuto garantiza los niveles de entrega de productos al mismo nivel que cuando era estatal, incluyendo no solo cárnicos, aunque quedó claro en el debate, la conveniencia de cierta autonomía para comprar mercancías a otras entidades que abaraten los precios y aprovechar todas las fórmulas de autogestión dentro de los requerimientos legales establecidos en el país, para no caer en el mercachifleo. En El Pollito no hay el más mínimo vestigio de ello.

PRIMÓ LA TRANSPARENCIA

Es verdad, como dijo Miguel Catalá, Contralor Jefe en la provincia de Camagüey, la cooperativa tiene el reto de abrirse espacio y aprovechar las oportunidades de eventos y fiestas que se programen en la ciudad, como la del Tinajón, y atraer clientes hacia su local de la Avenida Finlay, un kilómetro antes de llegar al aeropuerto Ignacio Agramonte, inmueble necesitado de una reparación, de una nueva imagen corporativa y de ambientación.

Uno de los dos cocineros, Eunys Abreu, no perdió oportunidad para expresar criterios sobre el funcionamiento de la cooperativa; y el económico, Yulet Raspal Docampo manifestó: “La Contraloría llegó en un momento en que le da fe y más confianza a los socios para seguir hacia delante en el proceso de implementar la cooperativa”.

El hombre de los números, las cuentas y los análisis sostuvo el fluido intercambio de información con los auditores, sin esconder nada “porque sabíamos que este control era también de ayuda hacia algo nuevo que surge y el país tiene mucho empeño de que avance”, criterio compartido por el joven presidente de la cooperativa Junior Puertas Fumero.

La calificación de aceptable otorgada por la Contraloría a la cooperativa no agropecuaria El Pollito como los resultados favorables apreciados en la Sucursal Palmares, tras minuciosas acciones de control, habla que no todo está perdido en materia de control interno.

Fue muy aleccionadora la jornada de cierre de la auditoría en ese centro. Todos, asociados y visitantes, entre ellos Aliberto Marrero Martínez, asesor jurídico de la comercializadora ITH; y Jorge Luis Calvaire, funcionario del Comité Provincial del Partido, tuvieron la oportunidad de hablar.

Uno de los últimos fue Leonardo Álvarez Leyva, Secretario General del Sindicato de Hotelería y Turismo en Camagüey. “Nos alegramos mucho de la calificación de aceptable.

“Nosotros como movimiento obrero estamos aprendiendo del experimento, de cómo atender a los trabajadores por cuenta propia y en este caso a los de la cooperativa. Estamos obligados a participar todos los meses en las asambleas que aquí se celebren”.

El Pollito, nacido en Palmares, no entre palmares, su experiencia abre las puertas a las cooperativas no agropecuarias, creadas a partir de unidades del turismo, sin el temor a enfrentarse al mercado con sus productos líderes como gancho para atraer clientes y ofrecerle calidad, bajo la premisa de alcanzar eficiencia y eficacia.

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