CAMAGÜEY.- Aunque la pulseada del gobierno con las Madres de la Plaza de Mayo tuvo la “virtud” de aumentar la impopularidad del presidente Mauricio Macri, son los saldos de su gestión económica los que parecen haber colmado la copa de los argentinos, que según el Observatorio Social de la Universidad Católica han ocasionado que más de 200 mil trabajadores hayan perdido sus empleos, después que este asumió el poder en el país sudamericano.

Macri, artífice del golpe social neoliberal que según él está dirigido a “enderezar” la economía de la nación solo ha conseguido que casi todos los sectores estén en recesión y ocho de cada diez nacionales hayan señalado que se han visto obligados a recortar sus gastos para poder hacerle frente a los costos del presupuesto familiar.

Es obvio que el “tarifazo” de luz , gas y agua decretado por el gobierno es imposible de pagar en opinión de siete de cada diez ciudadanos, de acuerdo a lo dado a conocer por el Centro de la Opinión Pública (Ceop), de allí que lo argentinos estén pidiendo que los órganos de Justicia competentes hagan retrotraer al mes de marzo los incrementos de estos servicios básicos y desaparezcan los incrementos que en unos casos es de un 200% y en otros, los peores llegan a un 2000%.

No obstante, el gobierno espera que la Corte Suprema ante quien está expuesta la demanda le de la razón en la aplicación del “tarifazo” fundamentado en el argumento de que había un atraso en la actualización de estos servicios, pero los expertos en el tema consideran que ello debe ser objeto de un proceso gradual, por etapas, y no imponerlas de una vez, ya que ello va en contra de los consumidores.

Todos estos “ajustes” en tan solo cinco meses de la asunción de Macri, quien lidera una alianza derechista y socialdemócrata han provocado que la inflación en lo que va del año se eleve a 30%, aunque se espera que de seguir las cosas como van dicha inflación pueda llegar al 45% al concluir 2016.

En relación con el costo de la vida las Consultoras económicas calculan que este se elevará en el presente a cerca del 50%, cifra que se considera la más alta desde la crisis de 2001-2002, aumento que recaerá sobre los sectores más vulnerables de la población argentina.

Como consecuencia del aumento del desempleo, los indicadores de pobreza se disparan y con ello las organizaciones sindicales y sociales se lanzan a las calles en demanda de que las políticas neoliberales aplicadas en detrimentos de los trabajadores sean derogadas y restituidos los despedidos en su antiguos puestos, al tiempo que las tarifas de gas, agua y electricidad regresen a sus anteriores precios.

Como se sabe, Macri se ha convertido en la punta de lanza contra la integración regional poniendo en su colimador a Venezuela, pieza clave en el proceso de unión regional de los países latinoamericanos y caribeños, no solo sumándose a las maniobras que el secretario general de la OEA urdió contra la nación bolivariana, sino ahora integrando la triada con Brasil y Paraguay que con sucios argumentos leguleyescos tratan de impedir que este país asuma la presidencia pro-témpore de Mercosur como le corresponde, de acuerdo al reglamento de esta organización.

La impopularidad del presidente es tal y las manifestaciones en contra de su política derechista de “ajuste” son tan frecuentes y masivas, que ahora el mandatario se hace transportar en un vehículo blindado por temor a que pueda ser objeto de represalia por el descontento pueblo argentino.