CAMAGÜEY.- Próximos a celebrar el Día Internacional de los Trabajadores, marcado en esta ocasión por la crisis económica provocada por la incidencia de la Covid-19 en el mundo, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) en Cuba traza e implementa estrategias para asegurar garantías laborales y salariales.

El necesario aislamiento social al cual obliga la pandemia, presente también en la nación caribeña, reorientó muchas de las habituales labores que se realizaban desde oficinas, instituciones y empresas hacia los hogares bajo la modalidad de trabajo a distancia y teletrabajo, sin afectar el cobro del ciento por ciento de los sueldos.

Esta decisión, una de las más importantes adoptadas por la máxima dirección del país, continúa hasta hoy con el propósito de proteger en primer lugar la salud de los trabajadores, mantener la vitalidad de la entidad para la cual laboran y lograr el cumplimiento de los planes previstos.

Solo en Camagüey, a partir de la compleja situación epidémica que presenta el territorio, actualmente en fase de transmisión autóctona limitada de Covid-19, se acogen a esta modalidad más de 13 mil 500 personas. 

Con aplicación en todos los cargos que su naturaleza lo permita, esta positiva experiencia retomada del año anterior, se mantiene con buena aceptación por quienes la implementan como es el caso de Niurka Viamontes, especialista de la Empresa de Investigaciones y Proyectos Hidráulicos de Camagüey.

En conversación con la Agencia Cubana de Noticias valoró de positiva esta medida por la posibilidad de continuar trabajando para el sustento económico de su hogar con el beneficio del pago de su salario.

Al respecto, aseguró que la comunicación ha sido constante mediante diferentes vías como correos electrónicos, mensajes de texto, y llamadas telefónicas para el intercambio de informaciones y toma de decisiones a través del uso de los recursos informáticos disponibles.

Otras garantías protegen al trabajador cuando sucede la paralización de la actividad fundamental de alguna entidad, ante lo cual lo primero es proponer una reubicación dentro o fuera del centro empleador para asegurar que puedan devengar un salario y así sustentar a la familia mientras dure la situación excepcional.

Actualmente, en esta demarcación una gran parte de las personas de los sectores de Educación,  Cultura y el Deporte ejercen cambio de labor en centros de la Salud Pública, la Agricultura y la atención a los adultos mayores, para apoyar a su vez, las acciones de enfrentamiento al virus.

En caso de que el empleado no pueda acogerse a esta modalidad ni pueda ser reubicado en otras tareas se declara interrupto y según lo establecido, el primer mes percibe el ciento por ciento de su salario básico y a partir del segundo recibe el 60 por ciento.

En el actual contexto económico con la implementación de la Tarea Ordenamiento se valora, además, que si la cifra resulta inferior a la que definió el país para la adquisición de la canasta de bienes y servicios, la administración del ente empleador debe reformular el cálculo para garantizarle esa cantidad.

De igual manera el trabajador que no pueda asistir a su centro laboral autorizado, al tener indicado el aislamiento preventivo por sospecha de contagio con la Covid-19, cobrará el ciento por ciento de su sueldo.

A todas las madres que tienen niños en la enseñanza preescolar, primaria y especial de acogerse a la interrupción laboral, se le otorga además, el derecho al ciento por ciento de su salario en el primer mes, y al concluir este disponen del 60 por ciento hasta que dure la actual coyuntura.

Bajo la premisa de que la principal seguridad es el empleo, estas y otras medidas adoptadas en Cuba permiten a los trabajadores mantener sus ingresos, en tanto contribuyen a una mayor prevención y control de la pandemia, la cual este Primero de Mayo, impone en el país una nueva forma de celebración.

Sin embargo, en una gran cantidad de naciones del orbe la epidemia ha afectado a cientos de miles de trabajadores, que han perdido no solo el empleo, sino incluso sus viviendas y la seguridad de adquirir los alimentos básicos para sus necesidades y las de sus familias en muchos casos.