MINAS,CAMAGÜEY. - En Cuba las lesiones no intencionales causadas por accidentes de tránsito son la principal causa de mortalidad en niños, adolescentes, adultos mayores, por lo que es esencial desarrollar acciones con enfoque educativo que protejan a quienes tienen el futuro del mundo en sus manos y a los que nos brindan su experiencia.

En estos meses venideros, en que tantos cubanos saldrán a nuestras calles y de vacaciones, especialmente niños y jóvenes, a diario cientos de personas interactúan como peatones, pasajeros o conductores, al hacer uso de la vía y de medios de transportación.

Es la etapa en que se dificulta más este servicio pues aumenta con creces su demanda por el traslado a disfrutar de la playa, del campismo, de centros de recreación; de instalaciones, espectáculos y actividades culturales, deportivas y de otros proyectos.

Ello obliga entonces a redoblar las medidas preventivas y de control por la Policía Nacional Revolucionaria, el cuerpo de inspectores y demás fuerzas especializadas, en aras de evitar accidentes del tránsito, acciones que van desde incrementar la revisión técnica de los vehículos, con énfasis en los de carga utilizados ahora para la transportación masiva, hasta la campaña de información y divulgación por cuantos medios sean posibles.

Lo cierto es que junto al desconocimiento y la falta de educación y concientización respecto al Código de Seguridad Vial, subyacen indisciplinas sociales, negligencias y comportamientos inadecuados en la calle, en la guagua y en otros tantos espacios públicos, hechos que también pueden poner en peligro la vida de una o más personas.

El fenómeno del alcoholismo, teniendo en cuenta que el consumo de bebidas suele incrementarse bajo el pretexto de refrescarnos del intenso calor, o durante los carnavales, por citar algunos ejemplos, gravita sin dudas en el aumento de la accidentalidad.

Las distracciones, el irrespeto del derecho de vía, el exceso de velocidad, la conducción bajo los efectos del alcohol, y el uso irresponsable de las nuevas tecnologías, se ratifican como las principales causas de accidentes de tránsito.

Entre las infracciones más comunes figuran también el no acondicionamiento en los camiones de barandas posteriores y laterales resistentes a frenazos o balanceos repentinos, permitir que las personas viajen de pie cuando las barandas miden menos de un metro y 20 centímetros; y exceder la capacidad de pasajeros establecidos.

A diario vemos a decenas de conductores que violan la ley al detenerse a esperar pasajeros próximos a paradas de ómnibus, a pesar de que el Código de Seguridad Vial prohíbe el parqueo a menos de 40 metros antes y 10 metros después de la señal oficial de parada de ómnibus.

A su vez algunas administraciones de centros de trabajo no ejercen el control ni la ejecución de la recalificación, capacitación y chequeos médicos establecidos para sus choferes profesionales, violación que trae como consecuencia lamentables accidentes en la vía.

Durante la revisión técnica de los vehículos se verifica el estado y funcionamiento de los sistemas de frenos, de dirección y suspensión; de luces, transmisión y carrocería; neumáticos; y la concentración de monóxido de carbono u opacidad de los gases de escape.

Hay choferes que se molestan cuando en la vía los agentes de la Policía los detienen con esos propósitos, y les imponen multas o les retiran la chapa y la licencia de conducción. Pero se han preguntado¿qué hubiera pasado de no atajarse a tiempo tal o más cuál infracción?

Es inaplazable la aplicación de cuanta medida haya para proteger a la población de los accidentes del tránsito y las violaciones del Código de Seguridad Vial que provocan daños materiales y pérdidas de vidas humanas.