B0G0TÁ.- (PL) El senador colombiano Alberto Castilla llamó hoy a perseverar en las conversaciones de paz con el insurgente ELN y a reducir los enfrentamientos entre la Fuerza Pública y esa guerrilla, hasta llegar al cese el fuego definitivo.

El congresista por el Polo Democrático Alternativo (PDA), alianza nacional de izquierda, advirtió que no es momento de poner obstáculos o interrumpir ese proceso pacificador, sino de impulsar las pláticas entre los delegados gubernamentales y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), a fin de terminar el largo conflicto.

Según Castilla el atentado perpetrado el pasado 19 de febrero en los alrededores de la bogotana Plaza de Toros, que causó la muerte a un policía y heridas a más de una veintena, es consecuencia de dialogar en medio de la confrontación.

Mediante un comunicado esa organización insurgente admitió que uno de sus comandos urbanos ejecutó la agresión contra una patrulla del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), al que acusa de reprimir las manifestaciones sociales dando tratamiento de guerra a las demandas populares.

Todos los territorios donde opera el ELN están saturados de gigantescos operativos militares (...) ante esta realidad debemos responder con nuestro accionar armado contra las fuerzas atacantes para defendernos, reza un comunicado publicado en el portal oficial del grupo rebelde "Voces de Colombia".

Es necesario revisar lo acordado entre el Ejecutivo y el ELN, pues aunque inicialmente decidieron empezar las negociaciones bajo los efectos de la contienda, la sociedad opina que es urgente decretar el cese el fuego bilateral, subrayó el legislador.

El parlamentario del PDA confirmó que la semana previa viajó a la capital ecuatoriana una comisión de ese partido con el objetivo de proponer a las partes una serie de pasos que les permitirán avanzar hasta la suspensión de los enfrentamientos y hostilidades.

Acabamos de entregar esa propuesta y no debemos divulgar muchos detalles, pero puedo adelantar que sugerimos adoptar medidas de un lado y otro, referidas por ejemplo a atender la situación de algunos presos en las cárceles del país y disminuir los ataques del ELN, para allanar el camino rumbo al silencio de los fusiles, precisó.

Las reuniones públicas con el Ejército de Liberación Nacional, menos numeroso que las FARC-EP, pero igualmente activo hace medio siglo, comenzaron el 7 de febrero pasado, a más de un mes de la firma de la paz con esa otra agrupación guerrillera, la mayor de la nación.

La contienda interna ha dejado unos 300 mil muertos, casi siete millones de desplazados de sus lugares de origen y al menos 45 mil desaparecidos.

Al referirse a la implementación de los pactos suscritos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), Castilla mostró preocupación por lo que considera incumplimientos gubernamentales para habilitar los campamentos temporales de los antiguos combatientes.

Asimismo criticó las demoras en la tramitación dentro del Congreso de las reformas y leyes requeridas en este período.

El mecanismo de fast track (o trámite abreviado) sólo podrá utilizarse durante seis meses, debemos agilizar esos procedimientos con el propósito de garantizar una exitosa implementación, alertó.