Lima.- PL) El candidato presidencial peruano Pedro Pablo Kuczynski consolida una ligera ventaja sobre Keiko Fujimori, según un nuevo reporte oficial sobre 89,5 por ciento de las actas de votación de la segunda vuelta electoral peruana.

El informe emitido esta madrugada por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) sobre la elección de ayer asignó al postulante 50,52 por ciento de los votos, frente a 49,48 de su rival, diferencia que representa 231 mil 519 votos.

Al dar el primer reporte, anoche, el jefe de la ONPE, Mariano Cucho, pidió a la ciudadanía y a los partidos que esperan con calma y prudencia los resultados finales y anotó que hasta el fin de semana seguirán llegando actas de zonas remotas del interior y de la votación de emigrados en el exterior.

La candidata Fujimori confía en revertir el resultado justamente con esos votos, en medio de escepticismo generalizado, tras el llamado de Kuczynski a sus partidarios para defender el voto "para que no nos roben en la mesa".

Cucho descartó airado un fraude ante la alerta lanzada por el excandidato presidencial Fernando Olivera, quien dijo tener información sobre la presencia de elementos fujimoristas en el área de informática de la ONPE que podrían alterarlos resultados.

Los analistas Fernando Tuesta y Luis Davelouis consideraron segura la victoria de Kuczynski, más por errores de Fujimori que por los méritos del ganador.

Entre los factores que ayudaron al desenlace mencionaron el apoyo crítico de la líder progresista Verónika Mendoza al candidato, por considerar que Fujimori representa una amenaza a la democracia por su relación con el gobierno de mano dura de su padre, Alberto (1990-2000), preso por diversos crímenes.

También mencionaron la revelación de que el secretario general del partido fujimorista Fuerza Popular, Joaquín Ramírez, es investigado por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA).

A ello añadieron la difusión de una grabación adulterada con el que se trata de desvirtuar la denuncia, que involucró al candidato de Fujimori a la vicepresidencia, José Chlimper, y la acusación de que la candidata convertiría a Perú en un "narcoestado".

En las encuestas difundidas una semana antes de la elección, Fujimori llevaba una ventaja de hasta seis puntos, que se diluyó por los hechos mencionados.

{flike} {plusone} {ttweet}