En una conversación telefónica de media hora, Sánchez e Iglesias constataron este miércoles su "plena voluntad" de reanudar el diálogo para desbloquear las negociaciones sobre la conformación de un ejecutivo y evitar unas nuevas elecciones, informó un comunicado conjunto.

Ambos políticos coincidieron en la urgencia de poner fin al gobierno conservador de Mariano Rajoy, del Partido Popular (PP), en interinidad desde las elecciones generales del pasado 20 de diciembre ante la incompetencia de los políticos para llegar a un arreglo.

También hablaron sobre las reformas necesarias en España no sólo en materia constitucional, sino también fiscal, laboral y en términos de regeneración democrática, y comprobaron que "hay muchos puntos en común".

Aún así discreparon en la interpretación del pacto suscrito por los socialistas y Ciudadanos (C's), agrupación de centroderecha presidida por Albert Rivera que favorece una gran coalición con el PP y PSOE, fórmula impulsada sin éxito por Rajoy.

Muchos de esos puntos afines, según Sánchez, están incluidos en el controvertido acuerdo sellado con Rivera, el cual, ratificó, está vigente y abierto a otros partidos, pese a que fue impugnado por las formaciones de izquierda.

Precisamente, la ruptura de puentes con Podemos, que cuenta con 69 escaños en el Congreso de los Diputados, abocó a Sánchez a naufragar en su pretensión de llegar al Palacio de la Moncloa (sede del poder central), ya que en su investidura apenas logró el respaldo de C's.

Sin embargo, Iglesias subrayó que "la mejor inspiración" para el futuro de España es la constitución de un ejecutivo de los socialistas con Podemos, Izquierda Unida (IU) y Compromís, que obtendría más apoyos en la Cámara baja.

De cualquier manera, los dirigentes manifestaron respeto mutuo por los respectivos puntos de partida y descartaron la existencia de condiciones previas que impidan el diálogo y su firme decisión de frenar una nueva convocatoria a las urnas.

La decisión de sostener un contacto vía telefónica se adoptó la víspera, tras constatar "la imposibilidad de cuadrar las agendas respectivas" para un encuentro que estaba previsto esta semana.

Al igual que Podemos, IU considera insostenible construir un ejecutivo progresista y de cambio -como propugnan los socialistas- con el partido de Rivera, quien apuesta por una alianza con el PP.

Las fuerzas políticas tienen hasta el 2 de mayo para tratar de lograr un acuerdo que evite la repetición de elecciones el 26 de junio, tras la inédita fragmentación de votos emanada de las urnas el 20 de diciembre.

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