QUITO.- Miembros de la agrupación política Revolución Ciudadana insistieron hoy en que organismos internacionales viajen a Ecuador para verificar violaciones de los derechos del exvicepresidente Jorge Glas, en huelga de hambre por 18 días.

El pedido lo reiteraron en rueda de prensa la parlamentaria andina Rosa Mireya Cárdenas, las asambleístas Gabriela Rivadeneira y Marcela Aguiñaga, y Ricardo Patiño, representante de la directiva de la formación política.

Según explicaron, en el caso de Glas, transferido por razones no fundamentadas, de la cárcel 4 de Quito a una de máxima seguridad en Latacunga, donde su vida corre peligro, la solicitud es una cuestión humanitaria.

"Simplemente porque Fernando Alvarado (exsecretario de Comunicación sujeto a investigación) decidió salir del país, las autoridades del gobierno nacional tomaron una represalia y lo trasladaron de una cárcel a otra, donde las condiciones de salubridad y seguridad son lamentables, preocupantes", afirmó Patiño.
Tras considerar la decisión del Ejecutivo como absolutamente inexplicable, precisó que solicitaron un informe con los motivos del cambio de prisión, el cual aún no han obtenido, a su juicio, porque no existe.

Patiño agregó que recurrieron a organismos internacionales, no solo por el encarcelamiento, calificado de ilegal, pues el exvicemandatario no tiene sentencia firme, sino también por humanidad.

Con esa meta, presentaron un pedido en las Naciones Unidas para que sea entregado a la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, así como a la Cruz Roja Internacional y a la Conferencia Episcopal de Ecuador, en busca de su intercesión.

De su lado, Aguiñaga recalcó que hay nulidades y piezas fraguadas dentro del proceso contra Glas, condenado a seis años de prisión por asociación ilícita en el caso de corrupción de la constructora brasileña Odebrecht.

"Evidentemente, lo que debe saber el mundo es que el vicepresidente Jorge Glas no ha tenido posibilidad de tener un juicio justo, sin presiones, y lamentablemente la justicia ecuatoriana ha cedido ante presiones políticas, mediáticas y esperemos que no económicas", aseveró.

Aguiñaga insistió en que actualmente no tiene sentencia condenatoria en firme, pues está pendiente un recurso de casación permitido por el régimen procesal penal ecuatoriano.

En ese sentido, recordó que, según su defensa técnica, en virtud de las pruebas presentadas en el proceso no hay mérito para ser juzgado por asociación ilícita y se le impuso una pena basada en un código derogado, sin aplicar el principio de favorabilidad establecido.

Glas se encuentra desde esta madrugada en el Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM), de esta capital, a donde fue trasladado por una descompensación resultante de la huelga de hambre que lleva por 18 días.

Sus abogados y defensores aspiran a que el reclamo del exvicemandatario sea escuchado y a la salida del centro asistencial lo devuelvan a la Cárcel 4 de Quito, donde estuvo recluido desde octubre de 2017 hasta ser transferido el 21 del mes pasado a Latacunga, razón que desató su determinación de dejar de ingerir alimentos.

El reporte más reciente de los médicos de HCAM indica que Glas está estable, con signos vitales normales, pero debió ser sometido a alimentación e hidratación intravenosa.