Esa premisa resulta vital para los países en vías de desarrollo, declaró a PL Azalia Arias, oficial de Cambio Climático y Desarrollo Sostenible de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas.

Sin ese principio ni siquiera estaríamos hablando de la posibilidad de sentar en un mismo espacio a los grandes concentradores de riqueza y depredadores ambientales, con países como los nuestros, remarcó en el contexto de la conferencia climática mundial que sesiona en la capital francesa hasta el 11 de diciembre.

Arias subrayó que también denuncian los patrones de producción y consumo de las naciones industrializadas y sus acciones con relación a lo que se denomina contribuciones voluntarias para reducir la emisión de gases de efecto invernadero.

No son suficientes las que ellos dicen que van a asumir en tal sentido. Con los compromisos entregados de manera oficial no es posible bajar realmente el calentamiento de la temperatura global hasta los niveles recomendados, enfatizó.

La especialista ratificó el compromiso de la sociedad civil en la lucha contra el cambio climático, no sólo viéndolo en el espacio de la Isla, sino también pensando en el mundo en el que vivimos.    Para nosotros esta cita de París es la última oportunidad para que los Estados se comprometan a través de un acuerdo vinculante.

Igualmente es una prioridad mostrar lo que hacen las organizaciones de la sociedad civil cubana en ese diálogo de corresponsabilidad con las autoridades del país.

Por su parte, Liliana Núñez, presidenta de la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre, dijo a Prensa Latina que en el evento defienden el planteamiento de tratar de lograr hacia 2050 al abandono del uso de todos los combustibles fósiles.

Entendemos que se trata de un proceso complejo, que cada país tiene sus particularidades. Por tal razón es tan importante concretar un acuerdo con responsabilidades comunes, pero diferenciadas, reiteró.

Todo ello transita por la transferencia de tecnología, el uso de tecnologías apropiadas, lo que resulta muy caro para muchos de nuestros países. La voluntad política es esencial en ese proceso, al igual que el diálogo, sin lo cual no se puede avanzar, aseveró Núñez.

Varias organizaciones de la sociedad civil cubana participan en la Conferencia de la Naciones Unidas sobre Cambio Climático y en la Cumbre de los Pueblos sobre el tema que se desarrolla en paralelo.    

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