CAMAGÜEY.- Aunque matemáticamente con el tiempo seco sobre los cañaverales, es posible reducir el déficit de 30 000 toneladas de azúcar hasta las molidas de mayo, la impredecible evolución del clima y las constantes paradas industriales de los seis ingenios por averías, deficiencias operacionales y falta de caña, alejan a Camagüey de “colarse” en el selecto grupo de cumplidores de AzCuba.
Ese sentir condensado en líneas periodísticas, lo expresaron los dirigentes sindicales de base del Sindicato Azucarero frente a su secretario general del gremio en el país, José Antonio Pérez Pérez, quien puso en igualdad de importancia el fortalecimiento y funcionamiento de la organización en las unidades productivas y el cumplimiento de la fabricación del crudo, cotizado la libra a 20 centavos dólar en el mercado extranjero.
Los centrales azucareros de la mayor provincia de Cuba, debían acumular para esta fecha unas 100 mil toneladas del alimento y pese a que hay materia prima en pie para duplicar esa cantidad antes de que lleguen las tradicionales lluvias de primavera, apenas le restan 50 días fértiles a los rendimientos en marzo y abril para acercarse al plan, solo posible si se muele alto y estable en sus fábricas de azúcar, respuesta no lograda desde el inicio de la Zafra Chica de diciembre, salvo en el pequeño ingenio Siboney de Sibanicú , cuyos obreros ven disminuir las toneladas de los sobrecumplimientos y los indicadores económicos eficientes por el déficit de caña propia.
Por primera vez en muchos años, la reunión de los representantes del movimiento obrero no enarboló ninguna queja, demanda para mejoras alimentarias, vestuario, medios de protección, salarios…sino, lamentaron que el mal funcionamiento sindical en la base hoy sea tan perjudicial como las materias extrañas que entran al basculador y los baches y paradas de las industrias derivadas de deficientes reparaciones o bajo suministro de caña desde los cortes mecanizados, aun con modernas cosechadoras CASE y potentes equipos de tiro.
En el balance sindical 2016, planteado por el secretario general del sindicato Azucarero en Camagüey, Enrique Sosa Nieves y sus homólogos de base que representan a más de 11 370 afiliados, se escuchó más de una vez la aseveración de que La zafra no está perdida, disposición que reclama resultados eficientes, de lo contrario, la victoria será pírrica y a todo costo.
Sabias fueron las palabras del ingeniero especialista en caña, Ifraín Otero, presidente de la Asociación de Técnicos Azucareros de Cuba (ATAC), al imbricar la integración de la necesaria fuerza laboral de los cañaverales y las industrias, con la aplicación de la ciencia y la técnica entre los jóvenes de los politécnicos de la provincia y los obreros calificados, en la búsqueda de la eficiencia en la cosecha y producción de refino, crudo y miel.
El ingeniero, Lázaro Álvarez Padilla, director provincial de la Empresa Azucarera , manifestó que las proyecciones de AzCuba en Camagüey son incrementar las plantaciones para echar a andar el único central aún inactivo: el “Ignacio Agramonte”. Para ello -reiteró- no es suficiente el crecimiento cañero del 12% sostenido en el último cuatrienio .
“Necesitamos rescatar del marabú más de 25 000 hectáreas vacías y mantener niveles de siembra con calidad superiores a las 15 mil ha. por calendario, para que pueda ejecutarse la inversión del “Agramonte” y que los restantes centrales muelan no menos de 150 días de faena en venideras zafras ”.
